Jake La Botz, postales de vagabundeo
El músico y actor visita España para presentar las canciones de su octavo álbum de estudio
Madrid
Jake La Botz (1968) ha actuado en la última entrega de Rambo, ha tenido un papel en True Detective y ha trabajado junto a Scarlett Johansson. También es profesor de meditación y entre medias de todo ha grabado más de media docena de álbumes. Su última referencia, el espléndido Sunnyside, muestra todo el talento de este artista inquieto que ha tocado junto a Etta James, Mavis Staples, Doctor John o Ray Charles.
- Fechas de la gira española
La Botz comenzó cantando en el metro de Chicago cuando era un chaval y allí, en los andenes, descubrió los secretos del blues, unos secretos que ha ido aplicando a su música, un cruce de caminos entre la canción de autor, los sonidos de Nueva Orleans y la energía de Chicago. Pero su historia incluye decenas de ciudades y de trabajos, desde techador hasta escritor de obituarios. Su largo viaje musical ha ido dando forma a un cancionero que retrata la otra cara de la sociedad estadounidense, los perdidos, los que se quedaron sin esperanza, los que olvidaron sus sueños. Un retrato pintado desde el soul, el blues, el country o el góspel, pinceles habituales del compositor para hacer unos cuadros que resultan tremendamente personales.
Con una voz áspera y con matices, La Botz arrastra al oyente a su mundo desde los primeros acordes de cualquier canción. Su música, en canciones como Hard to love what you kill, Hobo on a Passenger Train o Everybody got to fall down, engancha con fuerza mostrando el universo musical de este veterano artista que sabe retratar ese mundo que muchas veces se escapan de la mirada de los grandes cantantes.
El cantante y compositor se consolidó como músico tras la intensa gira que lo llevó por medio EEUU tocando en tiendas de tatuajes, una gran idea por la que La Botz recibió mucha atención mediática. Desde entonces, el músico ha aparcado su carrera cinematográfica para centrarse en la presentación del Sunnyside, el álbum producido por Jimmy Sutton, hombre de confianza de JD McPherson. Un disco que funciona desde la primera canción y que bien sirve, tras ocho álbumes, para presentarse en sociedad por la puerta grande.