“Hacer 100 kilómetros en un coche eléctrico cuesta 2 euros”

En este especial, entre otros temas que hemos ido desglosando desde el lunes, hablamos de energía y sostenibilidad. Rafael Del Río, director técnico de AEDIVE (Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico), subrayó que, en términos de contaminación, hay diferencia total entre el uso de un coche eléctrico y uno de gasolina o diésel: “El funcionamiento del coche eléctrico no emite, no solo CO2, sino ningún otro tipo de los demás contaminantes como los óxidos de nitrógeno, que causan las boinas de color marrón que tenemos ahora en las grandes ciudades; ni partículas que provocan las enfermedades respiratorias”. Continuó diciendo: “Mentiríamos si dijéramos que no emite absolutamente nada, porque un 50% de la generación de electricidad se hace con combustible fósil o con gas. Pero el coche eléctrico puro emite un 75% menos, incluso contando con las emisiones que se producen al generar la energía eléctrica”. Del Río hablo de otras ventajas: “En ciudades como Madrid permite aparcar en cualquier sitio, en plaza verde o azul, sin pagar nada y sin límite de tiempo. Utilizando una tarifa eléctrica normal y corriente, hacer 100 km en un coche eléctrico es menos de 2 euros. El mantenimiento del coche es mucho más barato: no hay aceites ni sustitución de agua”. Jorge Morales, nuestro experto en energía, cree que antes incluso de decidirse por usar el coche eléctrico hay que preguntarse si hace falta o no tener coche: “Empezamos a ver, sobre todo en grandes ciudades, el futuro de la movilidad: compartir coche entre varios, empresas que tienen coches disponibles para que los alquilemos por minuto”. Morales cree que no derrochar es la mejor forma de ahorrar en energía: “Y hay que tener muchísimo cuidado con las temperaturas. Ahora que empieza el verano, tener 25 grados en casa es razonable, no hace falta tener 18; lo contrario pasa en invierno, cuando nos debe valer con tener 22 grados”. A pesar de que Morales consideró positivo el consumo de energía con etiqueta verde, explicó que, en su opinión, el gran salto será el autoconsumo: “ponerse paneles solares y otras fuentes para consumir directamente nuestra propia energía. Ahí nos topamos con la normativa eléctrica, que yo confío en que en los próximos meses se vaya suavizando y nos permita poner eso sin trabas y con facilidad”. Y añadía: “La mayor parte de las emisiones de CO2 provienen del sector energético. Si fuéramos capaces de destronar a todas las fuentes contaminantes, en particular al carbón y al gas, del sector eléctrico, seríamos mucho más eficientes y, además, contribuiríamos a disminuir el impacto del cambio climático”. Laura Martín, consultora experta en sostenibilidad, explicó el concepto de economía circular: “La economía que quiere el valor de los productos el mayor tiempo posible y eliminar los residuos. Utilizar los productos tanto como podamos y que, desde el diseño mismo, que aquello que consideramos residuos se integren como recursos que puedan ser utilizados una y otra vez. Y se opone al modelo de economía tradicional de usar y tirar”.