"Mandela no sólo es un individuo, es una obra colectiva"
Javier Fariñas Martín y Antonio Lozano se asoman a La Ventana para hablar de sus obras recordando a Madiba
Madrid
Un 18 de julio de 1918 nacía Nelson Mandela en Mvezo, El Cabo, Sudáfrica. Madiba, como se le llama en su país, siempre batalló contra la dominación blanca. En sus 95 años de vida, de los que pasó 27 encarcelado, siempre defendió el ideal de una sociedad libre y democrática, donde todos pudieran tener igualdad de oportunidades. Un ideal por el que aseguraba estar dispuesto a morir.
El centenario de Nelson Mandela
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Hoy, cien años después de su nacimiento, recordamos al político, abogado, activista contra el apartheid y el primer presidente de color en Sudáfrica que fue elegido por sufragio universal. Lo hacemos desde dos visiones y dos libros muy distintos, que le homenajean.
Este miércoles se asoman a La Ventana dos escritores: Javier Fariñas Martín, periodista y autor de "Nelson Mandela. Un jugador de damas de Robben Island", y Antonio Lozano, autor de "El camino de la libertad". El primero narra una gran obra biográfica de Mandela, con la que a su vez reconoce la importancia de un pueblo que luchó por la libertad; mientras que Lozano ha optado por una visión novelada con enfoque juvenil.
Lozano, que ha narrado la historia de Mandela a través de un biznieto suyo imaginario que tenía trece años cuando el líder murió, cuenta que una de las voluntades de la novela es acercar a los jóvenes a la historia del mítico líder: ''En África, los jóvenes suelen conocer la historia de su pueblo a través de las preguntas que le hacen a sus mayores.'' Por eso, el protagonista de su novela descubre la historia de Madiba a través de otros personajes que se la cuentan, como su abuela. El autor asegura: ''La historia de Mandela es importante para todos los jóvenes, no sólo para los de Sudáfrica'' y añade: ''hay jóvenes que no han oído hablar del apartheid.'' Fariñas Martín recalca la importancia de la memoria histórica: ''Los jóvenes deben conocer esta historia, porque es un personaje de una grandeza tremenda y que hemos tenido al alcance de nuestra mano.''
En ambas obras hay una voluntad por humanizar a Madiva. Fariñas Martín declara: ''Mandela no sólo es un individuo, es una obra colectiva. Mandela no puede ser Mandela sin su madre, sin sus enemigos políticos...''
Algo que Lozano apoya, recalcando que siempre trató de separar el mito del hombre: ''Hay que acercar al personaje al ser humano que fue, con sus luces y sombras, con sus decisiones erróneas.'' Y añade: ''Hay que desmitificar, para que todos sepamos que era un hombre como cualquier otro que luchó con una gran capacidad de sacrificio y de liderazgo.''