'La casa de las flores', la telenovela almodovariana
La serie mexicana de Netflix ha sido uno de los éxitos del verano por renovar el género de la telenovela e introducir elementos cinematográficos y adaptarse a la comunidad LGTBI
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Madrid
El gran fenómeno de la televisión este verano viene de tierras mexicanas y se llama 'La Casa de las Flores'. Una vuelta de tuerca a la telenovela de toda la vida creada por Manolo Caro y adaptada a nuestros tiempos con mucho humor negro. La serie comienza con el suicidio de la amante del cabeza de familia con lo que todo el mundo se entera de que estaba manteniendo una relación. Virginia, la matriarca que gestiona una floristería, es una mujer burguesa que interpreta Verónica Castro, todo un hito de la interpretación en México, que no puede soportar el "qué dirán" y que, desgraciadamente, ya ha confirmado que no continuará en la serie si es renovada.
¿Qué tiene La Casa de las flores que ha enganchado a tanta gente? Para empezar, como dice el periodista José Sotonovode La Sexta, la serie juega con los ritmos de la telenovela, pero la renueva e incluso llega a parodiarla en algunos momentos. "Bebe de Mujeres desesperadas o del cine de Almodóvar", añade en La Script.
Otro de los motivos es la inclusión de nuevos elementos de la sociedad actual que rompen los roles heterosexuales que promulgaban las telenovelas clásicas. De manera que hay un hijo gay, sin estereotipo y dentro de la familia rica y protagonista. Pero el caso más claro es el del personaje que interpreta Paco León, una mujer transexual que vuelve para ayudar a su ex mujer y su hijo. Era Jose María y ahora es María José.
El personaje más célebre de la serie, sin duda, es la gran Paulina de la Mora, la hija mayor de la familia. Ella es la culpable de que todos nuestros amigos hablen entrecortadamente y su forma de ser, cortante y directa, nos ha encandilado a todos.
Hay que decir como curiosidad que Netflix ha prohibido a la actriz que interpreta a Paulina, Cecilia Suárez, que hable de esta manera tan peculiar fuera de la serie. Como cláusula de contrato, la plataforma quiere mantener esta forma de hblar como algo exclusivo de su producción. Comprensible, por otro lado, cuando ha llegado incluso a las redes con el #PaulinaDeLaMoraChallenge donde todo el mundo imita escenas como esta. Además de tratar con respeto y sin flivolizar temas como la bisexualidad o el adulterio, también se atreve a reírse con referencias al narcotráfico o la cultura mexicana. Y es más,
