Bolsonaro pone en peligro los pueblos indígenas

El recién elegido presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quiere explotar aún más la selva amazónica, hogar de decenas de comunidades indígenas, además de una zona vital para el planeta. Más de 100 tribus no conectadas habitan en Brasil y, “si sus tierras no son protegidas, se enfrentan a una catástrofe”, alertan desde Survival International, con pérdida de vidas indígenas y una destrucción ambiental sin precedentes.

Fiona Watson, Directora de Investigaciones y Campañas para Survival, denuncia un “ataque a los derechos territoriales de los indígenas” en las amenazas de Bolsonaro de “deshacer unas demarcaciones” y “no reconocer ni un centímetro más de tierra indígena”. Pero el problema no queda aquí. Fiona destaca además que el lenguaje que emplea el nuevo presidente de Brasil “está incitando a atacar e invadir los territorios”, por eso cree que la cuestión del racismo y la violencia van a empeorar bajo el mandato de Bolsonaro.

Los terratenientes, ganaderos, las grandes plantaciones de soja o caña de azúcar van a ser las grandes beneficiadas de los planes de Bolsonaro, así como las multinacionales de la explotación minera y de madera. De hecho, esto ya es un problema en Brasil, según explica Fiona, porque “hay ganaderos que son buscadores de oro ilegales que están trabajando en muchas tierras indígenas, y también del sector maderero que entra en los bosques indígenas, de gran biodiversidad con madera noble que no se encuentra en otras regiones”. Los pueblos indígenas de Brasil ya sufren de enfermedades importadas y ataques por parte de madereros, mineros ilegales y otros foráneos que intentan robar sus tierras.

La batalla se va a dar también en las cortes, vaticina Fiona, porque “hay toda una infraestructura y legislación que es buena” y está por ver hasta qué punto las instituciones brasileñas la defienden. En este momento son los propios indígenas quienes defienden la selva amazónica, “bajo condiciones pésimas, muy peligrosas”. Fiona lamenta que varios colegas indígenas de su organización han sido “asesinados por los invasores”. Considera que “son el futuro”, no sólo para los brasileños, sino para el mundo entero, porque el Amazonas es el pulmón del mundo.