Librerías en Navidad

Madrid

Junto la Feria del Libro en abril, la Navidad es la gran campaña para que lectores y no tan lectores compren libros. Todos compramos literatura. Macarena Berlín conversa con Pablo Bonet, secretario del gremio de librerías.

Conocemos los géneros literarios más vendidos estas fiestas. "La variedad es enorme", cuenta Pablo, aunque destaca el tirón que sigue teniendo la novela negra, de intriga y thriller. "También la autoficción, las novelas en las que los autores narran su propia experiencia, tiene enganche entre la gente". Además del ensayo sobre feminismo, género que también menciona entre los más vendidos.

Pablo Bonet considera que no hay mucha diferencia entre comprar para nosotros mismos y comprar para otros. "Normalmente cuando te ha gustado un libro o un tema concreto intentas descubrírselo a tu gente, pero si preguntas en las librerías también puedes descubrir otras posibilidades".

"Me parece que los libros son para todo el mundo", dice Pablo. No distingue géneros, pero destaca el auge de autoras potentes. Nos recomienda a Edurne Portela, último premio de la librería de Madrid, y su obra Mejor la ausencia. También La canción de los vivos y los muertos de Jesmyn Ward. "Dos libros sensacionales escritos por mujeres".

Pablo Bonet acaba de ser elegido secretario del gremio de libreros tras 18 años al frente de la librería Muga en Vallecas. Nos cuenta cómo son las navidades en una librería, un espacio tan cercano. "Se vive con mucha intensidad, vas preparando la campaña desde finales de noviembre, principios de diciembre, con muchos libros que recomendar y muchas ganas".

"Yo creo que las librerías son espacios de encuentro, son dinámicos y suceden cosas interesantes que relacionan a las personas, una experiencia que no puedes vivir en la red". Defiende así las librerías frente a la compra de libros por internet, un fenómeno cada vez más presente. Además, los comercios cercanos no se han quedado atrás, "se han modernizado, tienen unas redes sociales muy potentes y sobre todo son lugares de confluencia cultural". Según Pablo, las librerías ayudan a crear un "tejido social", apoyando así a los pequeños comercios.