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Un mal día lo tiene cualquiera

El reverendo que llevó una vida poco religiosa

La tele en nuestro país es innegable que tiene sus defectos, pero entre ellos no está el de tener un amplio abanico de canales llenos de chalados religiosos pidiendo que les mandes dinero. Estados Unidos, en cambio, va muy bien servido de este género televisivo.

RyanJLane Getty Images

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Un buen ejemplo de televisión religiosa sería el PTL Club, que funcionó durante casi 15 años, desde mediados de los 70s. Os descifraré el nombre por si os suena raro. PTL son las iniciales de Praise The Lord, o sea Alabemos Al Señor. Pero era más conocido como el show de Jim y Tammy, porqué lo presentaban el reverendo Jim Bakker y Tammy, su mujer. El programa era como un late night, pero centrado totalmente en que tenías que hacer para llevar una vida tan cristiana como los presentadores. Bueno, eso y peticiones de dinero, que tenían tanto éxito que llegaron a ser de más de un millón de dólares… a la semana. El estilo de vida que llevaban era típico del desenfreno de los 80s, un detalle que no parecía molestar a sus televidentes/donantes.

El reverendo que llevó una vida poco religiosa

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Si os está empezando a caer mal el reverendo Bakker, no os preocupéis. Él es, efectivamente, el que tuvo un mal día un 19 de marzo. El del año 1987, en concreto. Ese día abandonó de forma repentina el programa. Había sido acusado de violación por la secretaria de su congregación. Tammy se divorció de él y poco después salieron acusaciones de haber desviado grandes cantidades dinero de la iglesia a sus cuentas personales. Acabó en la cárcel y catalogado por otro telepredicador como “un cáncer en el cuerpo de Cristo”. Os gustará saber que el mismo que dijo eso acabó siendo detenido por contratar prostitutas.

Así que, si el día se os presenta mal, y vuestro trabajo no es exactamente una fuente de alegría constante, recordad que al menos no estáis estafando a la gente por la tele.

 
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