"Un cuidador tiene emociones muy bonitas pero también pasos muy amargos"
Pilar homenajea a su madre que ha cuidado durante años a su padre, enfermo de alzhéimer

Pilar: "Un cuidador tiene emociones muy bonitas pero también pasos muy amargos"
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Madrid
"Mi padre ha fallecido hace unos meses y quería homenajear a mi madre" comienza su relato Pilar. "Ha sido una enfermedad muy larga, el alzhéimer, pero especialmente los últimos meses han sido duros pues estaba en la cama, no quería comer, y mi madre hacía todo lo posible por ayudarle, siempre con una sonrisa, siempre con una palabra amable. Ha sido muy valiente, le levantaba, le cortaba su pelito, le ponía su ropa limpia, etc", describe. Un mensaje extrapolable a "todos los que cuidan de sus seres queridos. Son muchas emociones bonitas pero del mismo modo son pasos muy amargos. La gente que cuida en casa tiene que estar a su lado constantemente, se les cortan mucho sus alas".




