Uno de los conflictos más absurdos de la historia
Conflictos absurdos ha habido muchos, pero de los que recuerdo personalmente, este de hoy es uno de los que sin duda estaría en el pódium.
España
Tal día como hoy la dictadura que gobernaba Argentina en 1982, liderada en esos momentos por el general Leopoldo Galtieri, decidió que la mejor forma de distraer a la población de todo lo que iba mal en el país era invadir las Islas Malvinas, que Argentina se lleva disputando con el Reino Unido desde hace siglos.
Uno de los conflictos más absurdos de la historia
01:51
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/001RD010000005486235/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Si a Galtieri y a la cúpula militar les fue bien tener esta distracción a mano, no fue menos oportuna la guerra para la primera ministra del Reino Unido, Margaret Thatcher. Pese a que la utilidad de tener un grupo de islas al otro lado del globo es más que discutible, lo cierto es que la declaración de guerra le sirvió a Thatcher para ganarse una reelección que parecía complicada y al Reino Unido para fortalecer su imagen internacional.
Supongo que os estaréis preguntando “¿entonces para quién fue un mal día exactamente?”. Pues como siempre, para los soldados. El resumen de la Guerra de las Malvinas es bastante simple. Los argentinos invaden las islas. Los británicos mandan barcos de guerra a la zona, las recuperan y los argentinos se rinden. Pero para que esto sucediese, casi 1.000 soldados murieron y unos 2.500 resultaron heridos. La mayor parte de ellos, argentinos. Y todo para que el 14 de junio de 1982 la situación volviese al mismo punto que estaba el 1 de abril.
A mi personalmente no me cabe duda de que el ganador final fue la estupidez humana.