Sir Ranulph Fiennes, aventurero incansable
El británico ha cruzado los dos polos a pie y se vio obligado a cortarse los dedos de la mano él mismo debido a una congelación
Madrid
El británico ha cruzado los dos polos a pie y se vio obligado a cortarse los dedos de la mano él mismo debido a una congelación.
La trayectoria vital de este hombre ha estado marcada por la culminación de proezas, pero matiza: "Lo más impresionante que he logrado en mi vida ha sido mantener encendido el amor por mi mujer." Sir Ranulph conoció a Virginia, Ginny, con 12 años, y permanecieron unidos hasta la muerte de esta por cáncer, en el 2004.
Tras su retirada del ejército, ya en la década de los 60, Fiennes comenzó a forjarse como aventurero. Su primer gran reto, fue remontar el Nilo con un aerodeslizador en 1969, animado por su mujer.
Las aventuras continuaron con el glaciar noruego de Jostedalsbreen en 1970 y su siguiente gran expedición (Expedición Transglobe) la realizó entre 1979 y 1982 cuando con un par de compañeros viajaron alrededor del mundo haciendo la primera circunnavegación polar (atravesar el planeta de polo a polo siguiendo el meridiano de Greenwich) usando solo medios de transporte de superficie, algo que no había hecho nunca nadie en la historia. En total recorrieron 83.685 km en tres años.