La nueva ilusión de Ágatha Ruiz de la Prada

Madrid

La empresaria, diseñadora y creadora Ágatha Ruiz de la Prada visita #ElFaroParís para charlar durante la madrugada con Mara Torres de toda una vida. Nos ha hablado de su relación casi de necesidad absoluta con el mar y sobre una infancia "feliz en la casa más bonita de Madrid". Crecida en el seno de una familia noble con un padre destacado en el mundo de la arquitectura moderna y una madre acostumbrada a relacionarse con la flor y nata de España en aquel momento pero que "no se impresionaba con nada".

Precisamente esa madre, acostumbrada a estar en casa "y tan aburrida por no trabajar", despierta en Ágatha ese deseo por buscarse una vida propia. Con 23 años monta su primer desfile y desde entonces hasta hoy ha hecho crecer un imperio que desde la moda y el color, su filosofía, se ha ido extendiendo por casi todos los campos del mercado. "Siempre he pensado que el color te protege, te mete energía positiva", ha exclamado. 

 En este programa dedicado a París, la diseñadora nos ha contado que vivió allí una de las etapas más alucinantes de su vida, en una ciudad en plena convulsión y movimiento que la inspiró y enamoró a partes iguales. En el año 1975 la muerte de Franco la pilla en la ciudad francesa. "Pararon la televisión francesa y dijeron que el General Franco había muerto, viví el movimiento de todos los exiliados en el metro y en las manifestaciones, todo nos parecía la movida del siglo", ha apuntado. 

Ruiz de la Prada se ha sentido siempre "diferente". Lo ha sentido desde niña y ha intentado plasmar esa realidad en sus creaciones. "Siento que a lo mejor he sido siempre una arquitecta frustrada", ha exclamado. Además de esa extravagancia nos ha explicado que, para ella, "la comodidad" en la ropa que diseña ha sido y es un básico. "Es a partir de al comodidad cuando puedes hacer cosas, construir cosas, ser la mujer que quieres ser", ha concluido. Además siempre se visto como una visionaria: lo que piensa acaba en la moda años después. 

Con su interés por las formas y la decoración ha decidido en los últimos meses lanzarse a la aventura de construir un hotel que verá la luz dentro de "muy poco tiempo" en Valencia y que podrá reunir muchas otras creaciones de sus últimos años. 

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Para terminar nos ha hablado de su interés por la ecología algo que, admite, se ha convertido en una obsesión en su vida. "Tener el planeta limpio es algo fundamental, aunque solo fuese por tenerlo limpio y no quisiésemos conservarlo", ha añadido.