El día que Kobe Bryant ganó un Oscar y se convirtió en estrella de Hollywood
El jugador, fallecido este domingo en un accidente de helicóptero, ha sido el único jugador de la NBA que ganó un Oscar
Madrid
Kobe Bryant no es solo una leyenda del baloncesto, también hizo historia al ser el primer jugador de la NBA en ganar un Oscar. Fue en 2017 con un proyecto que escribió y que produjo y narró. Se titula Dear Basketball y ganó el Oscar a mejor cortometraje de animación.
La película cuenta la historia del propio jugador de los Lakers y sus percepciones y recuerdos sobre el baloncesto. El jugador narraba esta historia, acompañada de la banda sonora de John Williams, uno de los grandes compositores de Hollywood, que ha creado, entre otras, las bandas sonoras de Superman y Star Wars.
"Como jugadores de baloncesto, se supone que solo tenemos que lanzar y driblar. Pero me alegro de que hagamos un poco más que eso", dijo Kobe al recibir la estatuilla. El relato se basa en una carta que escribió meses antes de retirarse del deporte y que se hizo viral. Además de contar con Williams, también estaba en el proyecto el animador de Disney Glen Keane, que ha participado en varias películas de la factoría.
"Crecí soñando con ganar campeonatos, pero nunca, ni en mis sueños más salvajes, pensé que formaría parte de la industria del cine… ¡y mucho menos que estaría en los Oscar! De niño soñaba con el baloncesto y trabajé muy duro para lograr mis metas. Un título, dos, tres, cuatro, cinco... Pero a veces, la vida y Dios te presentan otros caminos que no esperabas. Y este es ese camino. No puedo dejar de sonreír", dijo el jugador tras ganar el Oscar.
Pero no queda ahí su incursión en el mundo audiovisual estadounidense. También participó en un espacio televisivo deportido titulado Detail, que constaba de 16 capítulos. Ya desde los años noventa, cuando debutó en la NBA, empezó a aparecer en algunos espacios televisivos interpretándose a sí mismo. Algo que repitió en 2010 en la conocida serie de televisión Modern Family. En 2015 apareció en Padres por igual, una comedia con los actores Mark Wahlberg y Will Ferrer. En 2011, protagonizó el cortometraje La Mamba Negra, sobre su vida y dirigido por Robert Rodriguez. En ese mismo año produjo y protagonizó el documental Muse, centrado también en su carrera y que se estrenó en la cadena Swhotime.
El ex jugador de los Lakers consiguió en su dilatada carrera cinco campeonatos de la NBA, fue dos veces mejor jugador de las finales, participó dieciocho veces el partido de las estrellas y obtuvo dos oros olímpicos. Fallecía este domingo en un accidente de helicóptero, en el que también viajba su hija de 13 años. El accidente ha tenido lugar por un fuego originado en el mismo, mientras sobrevolaba Calabasas (California). Tras conocerse la noticia, han sido muchas las estrellas del mundo del cine que han mostrado sus condolencias. Por ejemplo, Anthony Hopkins, John Legend, Ellen DeGeneres o Reese Whiterspoon.
LA CARTA DE KOBE BRYANT
Desde el momento en el que empecé a ponerme las medias de jugar de mi padre, disparando mi imaginación con tiros ganadores en el Great Western Forum, supe que una cosa era verdad: quedé enamorado de vos. Un amor muy profundo al que le entregué todo, desde mi mente y mi cuerpo hasta el alma y el espíritu.
Siendo un niño de seis años, profundamente enamorado de vos, nunca vi el final del túnel, solo me veía a mí mismo corriendo para salir de uno. Y corrí, corrí hacia arriba y abajo de cada cancha, después de cada balón perdido, por vos. Exigiste mi empuje, te di mi corazón, porque eso vino con mucho más.
Atravesé el sudor y el dolor, no porque el desafío me llamase, sino porque VOS me llamaste. Hice todo por VOS, porque eso es lo que hacés cuando alguien te hace sentir tan vivo como vos me has hecho sentir.
Concediste a un pequeño niño de seis años su sueño Laker, y siempre te amaré por ello. Pero no puedo amarte de manera tan obsesiva por mucho más tiempo. Esta temporada es lo último que tengo que dar. Mi corazón puede atajar los golpes, mi mente puede lidiar con la dura rutina, pero mi cuerpo sabe que es tiempo de decir adiós.
Y eso está bien. Estoy listo para dejarte ir. Quiero que lo sepas para que ambos podamos saborear cada momento que dejamos juntos. Los buenos y los malos. Nos hemos dado todo lo que tenemos mutuamente.
Y los dos sabemos que no importa lo que haga después, siempre seré ese niño con las medias y los cubos de basura en la esquina: "05 segundos en el reloj, balón en mis manos 5. 4. 3. 2. 1"
Siempre te amaré,
Kobe
Pepa Blanes
Es jefa de Cultura de la Cadena SER. Licenciada en Periodismo por la UCM y Máster en Análisis Sociocultural...