Una empresa valenciana dona 100.000 mascarillas a China
Entrevistamos al dueño de Sesderma, la empresa de dermocosmética que ha donado 100.000 mascarillas a China para frenar el contagio del coronavirus
Gabriel Serrano: “No es un problema de China, es de escala mundial”
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Madrid
Una de las primeras recomendaciones para evitar el contagio del coronavirus es utilizar mascarillas, pero su demanda ha aumentado tanto que prácticamente no hay. Sin embargo, una empresa valenciana de dermocosmética, Sesderma, la primera en donar 100.000 mascarillas a China. En ‘La Ventana’ hemos podido hablar con el doctor Gabriel Serrano, el fundador de esta empresa.
“Esto es un tema de solidaridad con China, un país donde tenemos oficinas y empleados”, nos cuenta el doctor Gabriel Serrano. El día del Año Nuevo chino, en una cena con asociaciones de la comunidad china, Gabriel se comprometió a donar esas 10.000 máscaras. “Parecía que iba a ser algo fácil, pero me costó muchísimo”, admite el doctor. Por suerte, Sesderma tiene presencia internacional y todas las filiales colaboraron con la ayuda. “Las primeras máscaras salieron de nuestra filial de Nueva Delhi y muchas otras han salido de Valencia”, explica.
La gente tiene que entender que en China estaban celebrando el Año nuevo chino y todos se desplazan para visitar a sus familiares. El periodo de las vacaciones ha sido prolongado por el gobierno chino para evitar que el coronavirus llegue a ciudades grandes como Beijing o Shanghái.
Desde abril del 2019 Sesderma tiene una filial en Shanghái, donde han tenido una muy buena acogida. Pero Gabriel insiste que, “si esto hubiera pasado en cualquier otro país del mundo, hubiéramos hecho lo mismo”. “Los médicos tenemos una actitud humanitaria y de combatir el sufrimiento de la gente”, cuenta Gabriel.
Gabriel conoce de primera mano la situación que están viviendo en China porque muchos de sus empleados están allí. “Los médicos están reventados de todo el trabajo que tienen y a veces no pueden ni parar para comer”, explica.
Las mascarillas que fabrican en su empresa tienen unos filtros que impiden la entrada de bacterias y virus, algo básico para evitar que se propague. Gabriel recuerda que la población más propensa a contagiarse son los ancianos y los niños, y deja claro que “este problema no es de China, es de escala mundial”.