¿Colapsovirus en Barcelona?

Madrid

Desde hace cuatro meses, todos los días entre las ocho y las diez de la noche, manifestantes independentistas de la Assemblea Nacional Catalana cortan la Meridiana de Barcelona, una de las principales arterias de la ciudad, para molestia de conductores, vecinos y comerciantes atrapados por los tremendos atascos o afectados por sus consecuencias. Ahora contraataca Sociedad Civil Catalana que anuncia que bloqueará los túneles de Vallvidriera todos los viernes al caer la tarde, “para que los independentistas tampoco puedan ir a esquiar tranquilamente”, ha dicho en rueda de prensa el presidente de esta entidad antiindependentista.

Esta consideración sobre a quién molestas según qué calle cortes merecería capítulo en un tratado sobre la estupidez humana. Y otro se lo llevaría esta acción-reacción en una competición “a ver quién es el que la corta más grande”. Pero hay una tercera pata digna de mención, la de la Consellería de Interior que se ha negado hasta ahora a cortar los cortes en nombre del derecho de manifestación. Si ese es el criterio, suponemos que tampoco actuará contra estos nuevos bloqueos. Y la pregunta es dónde situarán el grado de colapso ciudadano antes de actuar contra esta estúpida competición.