Europa se mueve

Madrid

"No hay vida, centro de trabajo o negocio que permanezca ajeno a este shock global". Eso dicen Merkel y Macron en el comunicado con el que anuncian los quinientos mil millones de euros, medio billón, para la reconstrucción poscovid de los países más afectados. Ahora le toca mover ficha a la Comisión, que aún tiene que concretar su proyecto, pero el acercamiento entre París y Berlín abre la puerta y empieza a coser la fractura política norte-sur que se había reabierto de forma peligrosa, explicitada por Holanda, pero arraigada en parte de las opiniones públicas de otros países del centro y el norte del continente.

Queda mucho recorrido por los laberintos comunitarios, está por ver qué piden a cambio. Parece claro que con quinientos mil millones no se ataja la hecatombe económica que nos anuncian, pero Berlín y París acercan posturas, con guiños de Macron al sur y esa es hoy la noticia. Ayer Romano Prodi, el histórico líder democristiano italiano, decía en La Vanguardia que si París, Roma y Madrid siguen juntos, cambiará la Unión Europea. Y decía más. Decía que acepta lecciones de Alemania, pero no de Holanda porque se ha convertido en el mayor paraíso fiscal de Europa.

Veremos cómo encaja Bruselas la anomalía española. Porque quizá estamos a punto de observar cómo 27 países -unos fundadores de la Unión, otros procedentes de la antigua Unión Soviética, cada uno con sus rémoras y dificultades internas- se ponen de acuerdo frente a una pandemia que ya está cambiando el mundo. Y aquí, en esta esquina de Europa, eso parece imposible.