La serie de Berto Romero se hace mayor

Madrid

Hay quien dice que lo más complicado a la hora de escribir un libro, una película o una serie es darle un final. La próxima semana Movistar estrena la tercera temporada de la serie “Mira lo que has hecho". Una historia que comenzó hace 2 años cuando Berto recibía la " feliz" noticia que iba a ser padre pero resultó no ser tan fácil. Cuando todo empezaba a encauzarse llegó la segunda entrega con un doble embarazo, una familia en reformas y el rodaje de una serie donde la historia era la propia. Pero ha pasado el tiempo desde el nacimiento de los gemelos y Berto y Sandra son familia numerosa. Esta tercera temporada cierra esta trilogía escrita a seis manos aunque “no nos conocíamos y la serie nos ha permitido conocernos y crecer como equipo. La serie nos ha ido hablando de lo que quería ser y sólo ha sido cuestión de escucharla”, nos dice Enric Pardo. Este equipo tiene aprendido su método de trabajo que “empieza siempre con unos minutos de cacareo. Después ya hablamos de personajes, de temas, qué ángulos y que desarrollo pueden tener. En esas reuniones de hora y media se toman decisiones y se diseñan tramas para después escribir cada uno por separado. Y después los textos pasan por las manos de todos”, explica Berto Romero.

En esta última temporada los niños tienen un mayor protagonismo aunque esta serie para Berto “nunca ha querido hablar sólo de niños. Lo que interesa es la historia de esa pareja que de repente debe dar el paso a la madurez. Es una serie chula que en esta temporada se ha hecho mayor, es la más adulta de las tres”. Esta comedia gamberra trata en esta última entrega de temas tan poco frecuentes como estafadores y vende humos, qué hacer con nuestros mayores o los límites del humor. “No sé si compartimos el mismo sentido del humor pero en la serie nos reímos de las mismas cosas y ha sido la serie la que nos ha ido diciendo que chiste debía entrar o no”, dice Enric. Sobre los límites del humor Enric Pardo es de la opinión que todo lo que tienen que decir está en la serie y “no vamos con ganas de hacer daño a nadie”. Esta idea la corrobora Berto Romero que entiende que “la serie no dispara a nadie pero retrata una sociedad, unas redes y unos medios de comunicación desquiciados”.