El Barça se deja dos puntos en Sevilla y aviva la lucha por la liga
El cuadro culé no fue capaz de certificar ninguna de sus ocasiones y si el Madrid gana en San Sebastián el domingo perderá el liderato
Madrid
Suelen ser encuentros plagados de goles y tensión. Hoy faltó lo primero. Ni Sevilla ni Barça pudieron finalizar sus acciones enviando el balón al fondo de las mallas. Para el primero quizá no era un problema. Para el segundo, que se juega LaLiga cada tres días, quizá sí. Ahora quedan dos días largos para el cuadro culé que deberá esperar al domingo para no perder el liderato. Si el Madrid gana en San Sebastián, dirá adiós al primer puesto.
En la primera mitad el Barça supo cómo hacerle daño al Sevilla. Lo hizo a partir de las descargas de Suárez (titular hoy después de cinco meses sin serlo) y la profundidad que le imprimió al juego. Mucho de Vidal sumando altura y mucho juego rápido con Busquets y Rakitic precisos en la distribución. A Messi se le vio un tanto precipitado en la conducción. Quizá por eso se llevó tantos golpes y se terminó enganchando con Diego Carlos y Koundé.
El Sevilla apenas se situó en campo contrario. Ante la falta de Banega, solo Óliver Torres aportó lucidez. De resto, el cuadro de Lopetegui no era capaz de triangular cuatro pases seguidos. Y sin ocasiones claras, salvo la falta de Messi que fue repelida por Jules Koundé con la cabeza, llegó el descanso.
La segunda parte comenzó con un cambio táctico en los locales que ayudó al Sevilla a posicionarse 20 metros más arriba en el campo. Fernando se colocó como líbero y Éver Banega, que entró en el tiempo de descanso, ocupó doble pivote con Jordán. Así el recién ingresado era el elegido para girar y dar el primer pase. Lopetegui necesita la jerarquía de Banega sobre el verde. Como relación causa-consecuencia llegaron las mejores oportunidades del equipo andaluz. Dos golpeos cruzados de Munir y Ocampos que contuvo ter Stegen con sendas paradas.
El Barça reaccionó y buscó con ímpetu el gol que le diera los tres puntos en una de las visitas más difíciles que le quedan. La pelota no entró. Y los de Quique Setién deberá esperar a un pinchazo del Madrid en San Sebastián para no perder el liderato.
Una acción para el recuerdo
Curiosa la forma en la que defendió el Sevilla una falta favorable al Barça botada por Messi. El perfil era idónea para el argentino. Desde esa zona suele afinar como si de un penalti se tratase. Pero Koundé, un segundo antes de que Leo golpeara el balón, retrocedió su posición y desvió el disparo con la cabeza. Está por ver si era una estrategia que ya había planteado Lopetegui, o fue pura intuición del central francés del Sevilla. Vaclik voló. Pero su compañero prefirió restarle trabajo con esa sacada casi bajo palos.
La polémica
A Messi lo tiraron y el argentino no se achicó. Se enfrentó a Diego Carlos y tras el encontronazo el brasileño acabó en suelo quejándose de un empujón. Las amarillas, sin embargo, la recibieron Fernando y Busquets. Cosas del fútbol.