Vitolo salva al Atlético con un gol a falta de diez minutos

El Atlético se llevó los tres puntos ante un Valladolid que dio algún susto en el Metropolitano. Los de Simeone no pudieron cerrar sus ocasiones con Joao Felix y Marcos Llorente sobre el césped (los artilleros de la anterior jornada ante Osasuna). Esta vez fue Vitolo, en un cabezazo a la salida de un corner, que le da al Atlético tres puntos vitales para su lucha por la Champions. El Valladolid seguirá una jornada más mirando de reojo el descenso. 

El comienzo del encuentro pudo ser una oda a Ronaldo Nazario, presidente del Valladolid y uno de los delanteros más clínicos de la historia reciente. Pero ninguna de las pelotas entró. Ni la enorme jugada que finalizó Waldo con estirada incluida de Oblak. Ni tampoco el cabezazo de Morata a centro de Héctor Herrera. A la espera de que el resto de los jugadores se entonara, Joao Felix siguió con su recital técnico, siendo el verso libre del Atlético. 

El cuadro de Simeone realizó siete cambios con respecto al partido contra Osasuna y situó a mucho jugador por dentro para tener amplitud por fuera con los laterales. Recordó al encuentro de pretemporada donde le endosó siete goles al Real Madrid. Tanto Lemar como Marcos Llorente (hoy de nuevo ejerciendo labores de atacante) se centraron. Mientras que Trippier y el joven Manu Sánchez generaron amplitud en los costados. El Atleti tocó y jugó casi todo el rato en campo contrario. Encontró al futbolista que tenía que encontrar (Joao Felix). Pero no fue efectivo. Y el Valladolid generaba peligro cada vez que contragolpeaba. 

De hecho, la ocasión más clara de la primera mitad la tuvo el cuadro visitante. Otra vez Waldo, esta vez como asistente, le regaló una pelota medida a Matheus, que se plantó solo delante de Oblak. La definición no cogió portería. El remate, entre el resbalón y la mala posición del pie de apoyo, no fue el mejor. 

En la segunda mitad, lo mejor que le pudo pasar al Atleti fue la osadía de Thomas para tirar de larga distancia. La primera del ghanés fue para avisar. La segunda propició un corner favorable que terminó siendo la jugada del gol. Chupirri despejó un balón que fue a parar a la cabeza de Vitolo, que movió el cuello con la fuerza suficiente para que el esférico rebasara por unos centímetros la línea de gol. Los jugadores del Valladolid reclamaron que la pelota no había entrado. Vitolo, en una esquina del área grande, ya celebraba el gol. Y la tecnología ayudó a determinar el 1-0 a favor del Atlético. 

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El Valladolid, incapaz en la segunda mitad de acercarse al arco de Oblak, no encontró la igualada en los últimos diez minutos.