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Juanma Comendador: el preso que graba canciones contra la violencia de género desde la cárcel

Un taller de música en la cárcel de Ponent (Lleida) lanza la carrera de un joven recluso que aguarda una segunda oportunidad para corregir los errores del pasado

El preso que graba canciones contra la violencia de género desde la cárcel

El preso que graba canciones contra la violencia de género desde la cárcel

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Madrid

Amor Ciego’ es un alegato contra el maltrato, con toques a lo Ketama y poquito de soul. La letra le vino a su autor, Juanma Comendador después de haber visto las noticias sobre el Día contra la violencia machista, el pasado 25 de noviembre en la cárcel de Ponent (LLeida) donde cumple condena por robo desde hace cinco años. De vuelta a su celda, Juanma le dio vueltas por la noche hasta que al día siguiente se presentó en el taller de música de la cárcel y le entregó la canción a su monitor. En veinticuatro horas, entre los dos le pusieron música y la grabaron en el estudio del taller de centro penitenciario. La lista de canciones compuestas por Juanma enfila ya la decena y se pueden escuchar en YouTube.

Esta tarde alumno y profesor, Juanma y Carlitos (Carlos Miñarro) se han asomado en La Ventana para compartir esta historia de segundas oportunidades y el poder de la reinserción en escenarios complicados de vida.

‘Soy de etnia gitana y esto se lleva en la sangre. Desde pequeño tocaba la guitarra y aprendí de oido, viendo a mi tio Vicente ‘Bruli’ tocando en las fiestas. Pero no había grabado una canción en un estudio, con un micrófono, en mi vida. Ni había aprendido lo que es un acorde, ni armonía. Y eso ha sido en la cárcel. Ha sido muy emocionante’ nos ha contado Juanma.

Juanma, de 28 años, cumple una condena de casi seis años de cárcel por un robo. Su historia, como tantas que se pueden encontrar en las cárceles, habla de una vida difícil, una madre que murió por la droga y a la que no pudo conocer, infancia en centros tutelados desde los 13 años, malas decisiones y malas compañía. A los 19 años cometió el robo que le llevaría a la cárcel tres años después. Para cuando tuvo que entrar en la prisión ya había encarrilado su vida, se había casado y esperaba un hijo. Tenía además un trabajo como mozo de almacén en una empresa cervecera.

‘En ese momento te sientes fatal. Mi vida ya era otra y es muy duro entrar en la cárcel. La justicia es lenta pero era consciente de lo que había hecho, por circunstancias de mi pasado, y cuando hay que pagar las consecuencias, pues no queda otra’, explica Juanma. Dentro de la cárcel, el taller de música y su encuentro con Carlitos, músico y monitor en Ponent fueron su tabla de salvación.

‘Nada más conocerle, ví el potencial que tenía, que era mucho. El flamenco le viene de serie pero además ha bebido de otras influencias como el rap, el trap, el reggaeton. Como yo le digo, Juanma, tienes un toque ‘ketamero y soulero’, eres un flamenco 2.0’, nos ha contado su profesor, Carlos Miñarro. ‘Eso sí, tiene tanta creatividad que me tiene agotado, le tengo que decir que no me traiga tantas canciones que no doy más de sí’, comenta entre bromas.

‘Yo me he sorprendido del potencial que hay en las cárceles y es muy reconfortante ver que el trabajo que se hace sirve para que gente con circunstancias de vida complicadas puedan tener puntos de agarre para cambiar de rumbo. Y Juanma es un clarísimo ejemplo’.

A Juanma la música le sirve para evadirse y para expresarse, pero también para contar a través de sus letras historias de lo que ha vivido y de lo que quiere dejar atrás. ‘Es por ejemplo lo que intenté con Amor Ciego. Nunca he podido entender cómo un hombre puede maltratar a una mujer. Aquí la convivencia no es fácil y hay muchos reclusos que cumplen condena por violencia de género. Si mis letras sirven para que alguno reflexione y se lo piense dos veces pues habrá servido para algo’.

Le quedan algo más de seis meses para cumplir condena: ‘el 2 de febrero acabo’. Y fuera le esperan sus dos hijos, una niña de seis años y un niño de cuatro, a los que tambien ha compuesto sendas canciones: ‘Mi pequeña guerrera’ y ‘Mi soldadito’. ‘Ellos son lo que más quiero. Y con mis canciones espero que no cometan los errores que cometió su padre’.

‘¿Te imaginas viviendo de la música?’, le ha preguntado Carles Francino. ‘Por imaginar, claro que me lo imagino, me encantaría, aunque sé que está díficil’, ha respondido Juanma. Pase lo que pase desde hoy tiene una invitación formal a La Ventana para que, cuando salga y haya saldado sus deudas con la sociedad, se venga a la radio para cantar sus canciones.

 
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