'Los europeos', cayetanos en la Ibiza que desafiaba a franquismo
Víctor García León dirige la adaptación de la novela de Rafael Azcona, un viaje a la Ibiza de finales de los 50 con Raúl Arévalo y Juan Diego Botto como dos señoritos en busca de bikinis extranjeros
Málaga
En 1960 Rafael Azcona publicó 'Los europeos', una novela donde el que sería el gran guionista del cine español radiografiaba un país que empezaba a dar síntomas de apertura pero conservaba la miseria moral del franquismo. Ahora Víctor García León, autor de 'Vete de mí' y 'Selfie', dos retratos de la España contemporánea, dirige la adaptación cinematográfica que fiirman Bernardo Sánchez y Marta Libertad. "El diálogo con la España actual es que seguimos como niños acomplejados y arrogantes, no estamos nunca bien con nuestros zapatos y nos cuesta arrojar luz de quienes somos de verdad", apunta el director.
'Los europeos' es la historia de Antonio y Miguel, dos amigos que viajan a la Ibiza de finales de los 50, antes del boom hippie y el desarrollo urbanístico, en busca de bikinis extranjeros. El primero, al que encarna magistralmente Juan Diego Botto, es el pícaro hijo de un arquitecto que consigue que su padre financie dos meses de borracheras y sexo en la isla. A su excursión -él lo llama espeleología de los cuerpos- arrastra a Miguel, joven provinciano que interpreta Raúl Arévalo, delineante precario que solo busca descansar. "Tienen un desdoble maravillloso, que es ser conscientes de que van a seguir las normas marcadas y a la vez saber que el rol que le corresponde es una puta mierda. Y las normas que se aplican para los demás es una farsa. Lo hacen a la vez y eso es una virtud que tiene muy poca gente", explica Juan Diego Botto.
Ibiza era en aquellos tiempos un oasis en la España que se asomaba al aperturismo. Las europeas lucían sus bikinis -hasta que aparecía algún tricornio- y encadenaban fiestas para sorpresa de los señoritos españoles, acostumbrados al recato de la moral nacional católica. "Es una España que vivía en plena censura, en plena dictadura, en plena represión. Ibiza esa otra ventana en la que te podías asomar a otro mundo en color, donde los europeos venían y te preguntabas si existía eso. Y desde esa pacatez, de esa España en blanco y negro, esto personajes observaban esto", comenta el actor.
Y en esas líneas de sombras se mueve la película, marcada por la luz inicial de un amor que se torna oscuro al otro lado del Mediterráneo, en la Barcelona clandestina. Un retrato de una España cínica que buscaba vías de escape pero guardaba y perpetuaba la mediocridad, la misoginia y la doble moral del régimen con estos gañanes. "Ayuda a entender quienes somos al ver a estos personajes. Las alarmas explotan, pero no por fuera, la represión y los muros van por dentro. Como la censura es una cosa que ha calado y permeado, la llevamos puesta, esta cosa de vivan las cadenas que están de aquí", explica el actor.
La actriz Stéphane Caillard encarna a esa Europa que había visto la luz después de la Segunda Guerra Mundial, el amor del personaje de Miguel, que descubre que no es el hombre que creía ser. "La crítica está muy presente. Hay un pesonaje que tiene la posibilidad de estar con una mujer que es claramente más libre, más independiente, más moderna, no sumisa, y el chaval no puede. Le queda grande. Y la mirada de Víctor, como la de Azcona, no está en la crítica a ese personaje femenino", añade Botto.
La cinta rebaja las situaciones de humor e ironía del texto de Azcona. Rodada con sobriedad y cierta melancolía, se centra en esa historia de amor para retratar los contrastes del contexto histórico y la aspiración a 'señorito' que pervive en la mentalidad española. Raúl Arévalo y Juan Diego Botto disfrutan con unos personajes que derrochan química y nos recuerdan porque el 'cuñao' y 'el cayetano' de hoy forrman parte de la historia de España. 'Los Europeos' se estrena el lunes 31 de septiembre en Orange y posteriormente pasará por las salas de cine.