Los escollos que mantienen bloqueada la fusión de Caixabank y Bankia
Analizamos los dos obstáculos que ambas entidades esperan resolver esta semana
Madrid
Fuentes de la negociación aseguran a la Cadena SER que hay dos obstáculos que los equipos de Caixabank y Bankia pretenden despejar antes del miércoles:
- El primero, ajustar el valor de Bankia. En la due dilligence –el periodo en que ambas entidades revisan la valoración de activos mutua– se está revisando a la baja el valor de la entidad madrileña.
- Y el segundo obstáculo y más importante, es la estructura de la nueva sociedad. Se pretende que la Fundación La Caixa controle más del 30% de la entidad resultante con un doble objetivo: mantener una “participación de control” –ese es el porcentaje que exige la Ley de Opas de 2007 en su artículo 4.a– y segundo, para blindar la compañía ante posibles intentos de compra de otras entidades, ya que el 30% de la Fundación la Caixa y el 15% de la Fundación pública BFA sumarían un 45% que haría prácticamente imposible la compra por parte de bancos rivales. Se intenta cerrar un blindaje anti-opas.
La estructura de capital, por tanto, sigue siendo el problema a esta hora. La estructura de gobierno se da ya por cerrada:
- José Ignacio Goirigolzarri –el hombre de Bankia—ostentará una presidencia con algunas funciones ejecutivas limitadas, simbólicas, dicen fuentes de la fusión.
- Gonzalo Gortázar –el hombre de Caixabank– será el Consejero Delegado y quien gobierne la nueva entidad resultante.
Fuentes de esa negociación dicen que se está trabajando para cerrar el acuerdo entre el miércoles y el jueves, aunque no hay fecha cerrada todavía.