Juana Acosta: "Conseguí reconciliarme con mi país, pero he tenido que perdonar mucho"
La actriz colombiana relata cómo la violencia, que vivió muy de cerca, marcó su vida y la manera en la que tuvo que reconstruirse
Madrid
La actriz Juana Acosta llega vestida toda de negro a la noche de la Cadena SER y con el pelo recién cortado en media melena para su próxima película que empezará a rodar con Imanol Uribe en menos de dos semanas. Sobre esa nueva melena, ahora más corta, una gorra también negra. Entra a El Faro bajo el seudónimo de 'Pamela', uno de sus últimos trabajos en la serie francesa 'Vernon Subutex', en la que interpreta a una vieja gloria del cine porno, y que la crítica señala como una de las series del año.
Juana Acosta: "Conseguí reconciliarme con mi país, pero he tenido que perdonar mucho"
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Su relación con el mar casi la incomoda, le da miedo, sospecha un trauma en lo profundo del mar en otra vida que pueda explicar ese pavor. Lo superó hace un año en un rodaje. En la media hora de conversación salen constantemente personajes y rodajes de los últimos años, de sus inicios en la televisión colombiana y de los que vendrán. Es una actriz que no para de trabajar y su vitalidad llena la madrugada.
Esta entrevista con Mara Torres es como un viaje a lo largo de su vida y la primera parada, después del mar, es el barrio de Cali, Colombia, en el que se crio. Esa imagen de una finca que varios padres, entre ellos los suyos, compartían para ver crecer a sus hijos juntos entre árboles de mango y el olor a jazmín evocan una infancia idílica. Pero la vida de Juana Acosta no ha sido fácil.
Con 19 años y tras haber triunfado ya en el prime time colombiano con varias series decide venir a formarse a la Escuela de Coraza en España. Huía, sin duda, también, de uno de los países más peligrosos del mundo con una violencia que había tocado su familia de lleno. El día que le comunicaron que habían asesinado a su padre tenía 16 años, vestía "ropa de danza" y nunca más volvió a bailar. El relato de una vida marcada por, no solo una, sino varias muertes tan dolorosas la ha obligado a renacer. Hay dos palabras fundamentales en su vida, esta noche es una prueba de ello: perdón y amor.
"Si yo no hubiera perdonado no sería la mujer que soy hoy, conseguí reconciliarme con mi país, pero tenía mucho y muchas cosas que perdonar, soy una víctima más de un país violento", ha explicado Acosta. Amor, en cambio, por la familia que le ha tocado, epicentro siempre de sus anhelos, deseos y mejores recuerdos.
Ahora estrena junto a Kiti Mánver 'El incoveniente', una película que habla de la soledad de dos mujeres y que la misma Costa define como una 'dramedia' por estar en el perfecto punto entre el drama y la comedia. Ha hecho, además, un alegato por la cultura segura y ha invitado a los oyentes a llenar con seguridad sala de cine y teatros.