Fin de las bravuconadas

Madrid

Se cumple de nuevo Pepa el refrán de que a Perro flaco todo se le vuelven pulgas. O dicho en términos más abstractos, como preferiría Javier Pradera, comprobamos que las actitudes se configuran en función de las expectativas. De otra manera sería inexplicable que, primero se sumaran cuatro cadenas de televisión, interrumpiendo la transmisión en directo de la soflama incendiaria de Donald Trump cuando estaba impugnando sin pruebas los resultados electorales.

Segundo, se desencadenara una catarata de felicitaciones de los líderes internacionales a su rival, Joe Biden, al que reconocían como ganador indiscutible de los comicios y presidente electo. Y tercero, se iniciarán las decepciones en las filas del Partido Republicano, donde el mismo expresidente George Bush daba el triunfo al candidato demócrata y confiaba en que devuelva la unidad al país. Fin de las bravuconadas. Basta de bromas. Haga las maletas y salga o le sacarán.