El 'baby' Barça, a octavos de Champions tras ganar en Kiev
Los menos habituales responden a Koeman con una victoria sin apuros que certifica la clasificación a la fase final
Koeman rotó y acertó. Un Barcelona repleto de rotaciones selló el pase a octavos de final de la Champions League en un encuentro frente al Dinamo de Kiev que dominó de principio a fin, aunque los goles de Serginho Dest, Braihwaite - por partida doble - y Griezmann no llegaran hasta el segundo tiempo. El danés fue titular por delante de francés, gran ausente en la alineación visitante.
La primera mitad fue un monólogo azulgrana en campo contrario, pero los de Koeman no lograban traducirlo en ocasiones de gol. Los ucranianos plantearon un sistema defensivo que minimizó los espacios cerca de su área y su propuesta en ataque consistió en generar peligro al contraataque, buscando las espaldas del debutante Mingueza y Lenglet. El partido se rompió tras el entretiempo, cuando el Barça sentenció el partido en apenas 20 minutos.
Los goles
La polémica
- Trincao cayó en el área en el minuto 33. Los jugadores del Barça pidieron penalti, pero el colegiado no señaló nada tras la revisión del VAR.
- El Dinamo de Kiev reclamó penalti en el minuto 47 tras el encontronazo entre Verbic y Lenglet en el área azulgrana. La acción quedó sin sanción.
Fueron tendencia
Braithwaite: El delantero danés se estreno como goleador esta temporada con un doblete que sentenció la clasificación azulgrana. Provocó un penalti que él mismo transformó para poner el 0-3 en el marcador.
Griezmann: El francés fue noticia desde que Koeman optó por Braithwaite para acompañar a Trincao y Coutinho en el tridente del ataque azulgrana. No obstante, disfrutó de media hora de juego y firmó el último gol visitante.
Pedri: Fue de los pocos habituales en un once repleto de rotaciones. El canario volvió a destacar por su actuación y destellos de calidad en un partido en el que el Barça se enfrentó a las líneas cerradas de los ucranianos.
Trincao: El más activo en el ataque de Koeman. El portugués fue incisivo por banda derecha y se asoció constantemente con Pedri y Dest, generando espacios en la férrea defensa local. Por ese flanco llegó el primer tanto del Barça.