El futuro ya es sólido
Desde que llegó el virus hemos vivido en un terreno de futuribles, de hipótesis que nos diesen algo de esperanza. Hoy hay fecha y lugar.

Madrid
No es lo mismo "ojalá nos volvamos a ver" que nos vemos "este día a esta hora en este lugar". Y desde que empezó el virus hemos vivido en un terreno de futuribles, de hipótesis que nos den algo de esperanza. Es decir, hemos vivido en el verbo condicional, que es el verbo del quiero pero no sé si puedo. Esto ocurre siempre cuando un golpe es muy fuerte; preguntas por qué se ha producido el golpe y automáticamente preguntas cuándo es la remontada. Hemos coleccionado declaraciones y titulares de científicos y políticos basados en la expectativa, en una mezcla de deseo y realidad. A veces declaraciones que parecían homeopatía, munición moral para la tropa. Y hoy tenemos una fecha y un lugar (Guadalajara, 27 de diciembre), algo por fin sólido que pisar. Es el fin de las conjeturas y de los presagios; el principio de algo tan real como la enfermedad, pero para combatirla.

Manuel Jabois
Es de Sanxenxo (Pontevedra) y aprendió el oficio de escribir en el periodismo local gracias a Diario...




