El mejor regalo

Esta mañana les saludamos desde Camargo, en Cantabria. Es nuestra última parada de una gira que, desde el mes de septiembre, nos ha llevado por toda España. La iniciamos en Torremolinos, en Málaga, cuando parecía que el país empezaba a despertar de la pandemia, después de una verano anómalo. No intuíamos las olas que vendrían después ni que el país volvería a sumirse en el letargo obligado por la pandemia.

Así que en nuestros más de veinte viajes hemos recorrido todas las restricciones a medida que recorríamos la geografía del país. Toques de queda, cierres de la hostelería y los comercios, limitaciones de aforo, por supuesto, hemos hecho programas en solitario, sin publico, los hemos hecho también con muy poquito aforo y hemos llenado también, en la medida que las restricciones lo permitían. Nos hemos movido con salvoconductos, con PCR superadas y hemos tenido bajas por Covid.

Hemos obtenido la fotografía más real de lo que ha pasado y de lo que nos ha pasado. Paseando por las calles de pueblos y ciudades hemos visto persianas bajadas que nunca volverán a subir, hoteles que no han abierto desde hace casi un año y medio, lugares emblemáticos sin turistas, hemos visto a mucha gente dormir en la calle, en definitiva, hemos visto las heridas que ha dejado la pandemia.

Pero hay una cosa que hemos vivido por encima de cualquier otra y ha sido reencontrarnos con ustedes, con los oyentes. Cuando empezamos esta gira veníamos de habernos necesitado más que nunca, ustedes a nosotros en el confinamiento, por la compañía que les hicimos, por la información que les dábamos, pero nosotros a ustedes también, porque les aseguro que eran el motivo para seguir cada día en medio de la soledad de las calles e incluso la soledad del estudio y de la redacción.

Volver a verles después de lo que hemos pasado ha sido el mejor regalo, infinitas gracias por estar ahí.