Los penaltis que cambiaron la historia de España
La tanda de penaltis disputada el 22 de junio de 2008 ante Italia, clave para que la generación de oro del fútbol español lograse el triplete de títulos
Este martes España e Italia disputarán la primera de las dos semifinales de la Eurocopa 2020 con un billete a la gran final del torneo en juego. En la previa de este partido es imposible no recordar el encuentro que ambos disputaron en junio de 2008 en Viena.
España venía de realizar una fase de grupos inmaculada: goleada a Rusia, victoria sobre la bocina ante Suecia y nueva victoria ante la vigente campeona, la selección de Grecia, con los suplentes.
Pero llegaban los cuartos de final y llegaba Italia, la cosa se ponía realmente seria. Italia era la vigente campeona del mundo, un equipo veterano y experto que logró que España, más joven y mejor equipo, no pudiera hacerle gol alguno en los 120 minutos y llevaron el partido a la fatídica tanda de penaltis.
Iker Casillas, el punto de inflexión
Con la historia española reciente, ser optimista en esos penaltis, pese a que España había jugado de maravilla en ese torneo, era algo realmente complicado. Era imposible no pensar en la mala fortuna que había perseguido al equipo español en los últimos años en los torneos internacionales.
Pero esa España era diferente y su capitán, Iker Casillas, se empeñó en demostrarlo. El portero del equipo detuvo dos penas máximas en la tanda y brindó a España la posibilidad de clasificarse para los cuartos de final. Cesc Fábregas, con el penalti decisivo, clasificó a España en las semifinales tal y como Mikel Oyarzabal hizo este pasado viernes en San Petesburgo.
Ese día España se ganó el respeto del mundo del fútbol y le perdió el miedo a las grandes citas. Tras ese encuentro, España bailó a Rusia en las semifinales y doblegó a Alemania en la final para conquistar su segunda Eurocopa.
Una Eurocopa que fue solo el aperitivo del Mundial conquistado en 2010 y la nueva Eurocopa que ganamos también en 2012. Una selección de leyenda que logró un triplete inédito que tiene su cuna sin lugar a dudas en ese 22 de junio de 2008 ante Italia en el Ernst Happel de Viena.