Los inmunólogos advierten: "Tenemos que maximizar las precauciones hasta que no haya más vacunados"
Alfredo Corell ha contado en Instagram que se ha contagiado a pesar de estar vacunado y ha advertido de los peligros de relajarnos por el avance de la vacunación en España
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Madrid
Alfredo Corell lleva meses contándonos la pandemia. El inmunólogo nos ha advertido de los peligros de no respetar las normas y nos ha explicado cómo funciona la vacuna y cómo se mueve el virus. Esta semana ha contado en Instagram que ha dado positivo por coronavirus: “Si alguien no tenía claro que esto no estaba terminando, vengo a decírselo. Se está disparando la incidencia y yo estoy haciendo cuarentena ahora mismo por COVID-19”. Hoy hemos hablado con él en ‘La Ventana’.
Ahora mismo Corell está “prácticamente repuesto” y solo ha tenido síntomas leves “compatibles con un catarro o con una reacción alérgica: malestar de garganta, moqueo y cansancio”. Aunque ya hace un mes que tiene la pauta completa de Pfizer y siempre ha respetado las normas de seguridad, el inmunólogo cree que se contagió “en una comida al aire libre con una persona que se empezó a sentir mal”. Eso fue lo que “disparó las alarmas”. Estos días sabrá exactamente de qué variante se ha contagiado.
Cambio de panorama
El de Corell es un ejemplo de cómo ha ido variando la situación con la vacunación: aunque los síntomas son más leves si se contagian, los vacunado pueden seguir extendiendo el virus. “Los síntomas más frecuentes en personas con vacuna son el moqueo, la garganta seca y el dolor de cabeza. El panorama ha cambiado y ahora la COVID se puede confundir con un catarro, así que hay gente vacunada que puede estar infectando a su alrededor”. Por eso tenemos que seguir estando alerta: “El cambio de síntomas nos puede hacer levantar las armas y los vacunados pueden pensar que no estarán en contacto con el virus, pero tenemos que maximizar las precauciones hasta que no tengamos un porcentaje mayor de población vacunada”.
También preocupa el nivel de ingresos en los hospitales. La cifra total sigue lejos de los números de enero, pero las hospitalizaciones crecen en general y afectan cada vez más a los menores de 40. Aunque las vacunas “generan una protección de casi el 100% en lo que se refiere a los ingresos”, como recuerda Corell, los pacientes siguen llegando al hospital por varias razones: puede que sus defensas “no respondan bien a la vacuna”, puede que “hayan perdido potencia porque tienen un sistema inmune debilitado” o puede los factores de riesgo (obesidad, hipertensión, asma) agraven el problema.
Sobre el excesivo optimismo de las administraciones en la desescalada, el inmunólogo cree que “nos hemos precipitado” con la relajación de las medidas: “Hemos transmitido mal el mensaje y nos ha faltado pedagogía. Y eso hay que matizarlo. Hemos perdido un poco la cultura de la mascarilla y lo que tenemos que trasladar es que debemos seguir yendo con la mascarilla a todas partes y solo nos la podemos quitar donde está permitido”.