'Wrong Turn': Sendero al infierno' o cómo darle la vuelta por completo al cine de terror
Mike P. Nelson presenta un reboot de la mítica saga slasher, 'Km 666: desvío al infierno', 18 años después de su estreno
Madrid
Wrong Turn: Sendero al infierno tiene claros los elementos que toda película de terror debe tener, ¿un grupo de jóvenes? Hecho, ¿un lugar misterioso al que les recomiendan no acercarse? Hecho, en este caso un bosque, ¿una'niña siniestra? También la tenemos, y ¿máscaras espeluznantes? Hecho, máscara y disfraz entero.
La fórmula está clara, pero Mike P. Nelson, su director, ha querido darle la vuelta por completo en este reboot de la saga de películas Wrong Turn, que se estrenó en España hace 18 años bajo el título Km 666: desvío al infierno. “Puedes ir y hacer otra de esas películas o puedes trabajar con el guionista original de la primera, quien quiere contar una historia completamente diferente y hacer algo diferente, algo único, atrevido. Para mí esa fue una de las mayores razones por las que quería hacer esto. Era nuevo, era diferente, sobrepasaba las expectativas de las típicas películas slasher, y nos permitía hablar de cosas que están pasando en la sociedad, nos permitía hacer una película de terror sobre suposiciones y estereotipos. Cuando leí el guion vi algo más fundamentado que en las otras seis películas y queríamos enfocarlo de esta manera y eso significaba que los caníbales, el gore, los brazos arrancados del cuerpo… no iban a estar más en este universo”, dice Nelson.
Aunque cuenta con Alan B. McElroy, guionista de la película original, nada es igual que en 2003 y, debido a la gran cantidad de fans que reúne la saga, eso preocupaba a todo el equipo, incluida Charlotte Vega, la española que protagoniza el film y a la que vimos en El secreto de puente viejo o Velvet. “Fue algo que comentamos muchísimo durante el rodaje. Es inevitable cuando es un remake o un reboot que haya los fans incondicionales que quieran algo más parecido a la original y luego los que buscan algo más nuevo, que no sea simplemente una copia de la original adaptada a los nuevos tiempos. Hay un poco de todo, no le puede gustar a todo el mundo, y eres consciente de ello, pero me ha sorprendido ver que hay bastante gente a la que le ha gustado, aunque sean fans incondicionales de la original, les ha gustado que sea una toma con algo más de argumento”, cuenta.
Esta Wrong Turn cuenta la historia de Jen, a quien da vida Vega, y sus amigos, quienes haciendo senderismo por el Sendero de los Apalaches se desvían del camino marcado, a pesar de que les advirtieron de que no lo hicieran, como no, y acaban en las tierras de una comunidad conocida como la Fundación, que hará lo que sea por proteger su estilo de vida. Paralelamente se cuenta cómo el Padre de Jen hace todo lo posibles por el encontrarles antes de que la naturaleza acabe con ellos.
Nelson ha querido dejar atrás en esta nueva versión de la saga el gore que la caracterizaba. Hay violencia, sí, pero sobre todo hay una crítica a aquellos que juzgan sin conocer, que se dejan llevar por las primeras impresiones, y a esa gente que se cree superior moralmente y arrasa con todo allá donde va sin tener en cuenta nada ni a nadie.
“Se sienten autorizados a cualquier cosa que quieran y no es así. Creo que hay una generación que se siente con derecho a tener lo que quiera y sintiendo que esa es su verdad, y cuando salen y les dicen que así no es como funciona, eso les vuela la cabeza y pone a todo el mundo en problemas. Creo que la película puedes verla como una crítica de eso y a la vez es un cuento moral. Si queremos seguir haciendo las cosas de esta manera, va a hacer daño a la gente, y en este caso hace daño físicamente para demostrarlo. Pero, además, creo que hay un mensaje en este cuento que dice que si hacemos las cosas diferente, hay una manera de convivir, si no queremos herir a la gente.
Porque sí, se puede hacer una película de miedo sin repetir la fórmula de arriba abajo, sin los típicos no abras esa puerta o no vayas por ahí, a estos jóvenes incluso les deseamos lo contrario, y se pueden hacer películas de miedo con moraleja.
“Tienes a la gente joven de la ciudad, intelectuales que vienen a pasar un buen rato y se creen que lo saben todo; tienes a la gente del pequeño pueblo, y tienes a la Fundación, que se supone que son los monstruos. Pero vas a ver un lado diferente de cada uno de estos grupos. Vas a ver el lado más villano y antagónico de nuestros protagonistas, el lado protagonista y empático de los antagonistas, y en la gente del pueblo, a los que ves como malvados o cerrados de mente, ves esa parte, pero también ves que hay un lado más humano en ellos y entiendes por qué actúan como lo hacen. Una parte importante de la película es no poner etiquetas, el bueno o el malo, porque todos los personajes cometen errores terribles que llevan a grandes problemas, y si algo dice este cuento moral es: ten cuidado con lo que das por hecho, los estereotipos pueden hacer daño, y en este caso pueden matar”.