La VentanaLa Ventana a las 16h
Sociedad | Actualidad

Fernando Domínguez, investigador: "Para conocer el clima del futuro, necesitamos saber cómo era el del pasado"

Una investigación pionera recoge datos de más de 3500 ritos para pedir agua que se celebraron hace siglos y nos pueden ayudar a contextualizar las sequías de hoy

La Ventana a las 16h | La sequía, otro síntoma del cambio climático

La Ventana a las 16h | La sequía, otro síntoma del cambio climático

48:58

Compartir

El código iframe se ha copiado en el portapapeles

<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1628514538155/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>

Madrid

El informe que acaba de publicar el IPCC, el panel de expertos de la ONU, sobre la emergencia climática responsabiliza directamente a los humanos de los fenómenos extremos. La comunidad científica lleva tiempo avisando: hemos provocado cambios ya irreversibles en nuestros entornos y lo fundamental ahora es reducir las emisiones de una manera “profunda” y “rápida”.

Como consecuencia de ese aumento de temperaturas que estamos provocando, lo más probable es que los fenómenos extremos como las sequías sean cada vez más frecuentes. De hecho, ya son cada vez más intensas. A finales de julio, un grupo de investigadores publicó un estudio que recopila información de más de 3500 ceremonias rogativas, esos ritos que se celebraban, entre otras cosas, para pedir agua cuando el tiempo era desfavorable.

La investigación se centra en 153 localidades de 11 países distintos a lo largo de más de 600 años. Lo que hicieron fue analizar cuándo y cómo se celebraban estos ritos para reconstruir el clima del pasado y saber cuándo había sequías. Hoy hemos hablado en ‘La Ventana’ con Fernando Domínguez, el investigador del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio de la Universidad de Zaragoza que ha liderado el estudio.

Un retrato de las sequías futuras

La intención del informe es entender mejor las sequías de hace siglos para saber cómo serán las próximas: “Para plantearnos cómo va a ser el clima del futuro, necesitamos saber cómo era el clima del pasado. Casi todas las estaciones meteorológicas registran un incremento de temperaturas. Tienen un componente importante para las sequías porque la capacidad de secar el suelo depende de esa subida de temperaturas”.

Lo que permite el estudio de estas rogativas es ir mucho más atrás en el tiempo. Los datos de las bases estadísticas se quedan cortos muchas veces porque llega un momento en el que el rastro de este tipo de fenómenos se pierde. Este grupo de científicos ha tirado de los registros documentales de estas ceremonias porque eso les permitía sacar conclusiones más extensas: cuanto más lejos en el tiempo, mejor.

Esto les ayuda a hacer un retrato más completo de lo que puede pasar: “Las sequías extremas son raras. Si analizas los últimos 100 años, puedes encontrar alguna sequía importante o alguna ola de calor extremo. Pero si te vas a los últimos 500 años, encontrarás más, y eso te puede ayudar a entender cómo se dan y por qué. Puedes poner en contexto lo que pasa hoy”.

Novenas y procesiones para pedir agua

Las ceremonias tenían un proceso burocrático detrás: “Primero, los agricultores iban al ayuntamiento a pedir la rogativa [cuando el tiempo era desfavorable]. Después, [el consistorio] se la pedía a la iglesia, que era la que ponía la fecha. El registro de esa rogativa es el que nos permitía verificar cuándo y cómo se celebraban”.

Normalmente, los ritos iban a más en función de si conseguían que lloviese o no. Eso les daba una idea a los investigadores de cuánto tiempo podían durar las sequías: “El rito litúrgico lo decidía la iglesia. Lo normal era empezar por unos rezos específicos para pedir agua; si seguía sin llover, organizaban una novena; si tampoco funcionaba eso, adoraban una reliquia o salían de procesión”. A veces, también celebraban misas de agradecimiento si al final llovía.

El informe se publicó en la revista Nature y está firmado por un grupo internacional de investigadores de varias universidades que forman parte de la iniciativa InPRO, una base de datos de rogativas pionera. Entre los países analizados están España, Francia, Portugal, Italia, México o Guatemala. En la mayor parte de religiones se celebraban ritos para intentar cambiar la meteorología cuando no era favorable, sobre todo para los cultivos. La religión católica usaba las rogativas propluvia.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00