Black Friday por partida doble

Madrid

La nueva variante del coronavirus y las restricciones que han ido anunciando distintos países europeos en sus vuelos para evitar su expansión han hecho cundir este viernes el pánico entre los inversores hasta el punto de que el Ibex 35 ha firmado su peor sesión desde junio de 2020. El parqué madrileño ha cerrado con una caída de un 5% lo que lo deja en los 8.402 puntos, lastrado especialmente por los valores turísticos. Entre ellos, destaca el desplome vivido por IAG, que se ha dejado un 15,5%, una caída similar, por otro lado, a la que han vivido las aerolíneas cotizadas en otros parqués del continente: Lufthansa, que cotiza en el DAX, se ha dejado un 12,3%, Easyjet un 11,4%, Air France, un 9,7% y el que ha salvado un poco mejor la jornada ha sido Ryanair, que aún así se ha dejado un 5,6%. En el continente la situación es similar, las caídas han sido algo más moderadas, pero aún así, solo Londres cae menos de un 4%, se deja un 3,7%. mientras que París, Milán, Frankfurt y el Eurostoxx retroceden algo más de un 4,5%.

"Creo que la caída de hoy no se explica exclusivamente por los temores al covid, sino que también hay que ponerla un poco en contexto: la subida que llevan las bolsas en los últimos meses. Pero, realmente cuesta pensar que este nuevo virus vaya a tener un impacto sobre la economía, desde luego nada comparable con lo que ocurrió el año pasado, y en ese sentido, lo vemos como un tropezón. Transitorio, importante, veremos al alcance que puede tener, porque después de las caídas de hoy se ha metido un poco el virus de la incertidumbre en el mercado y es posible que siga más tiempo, hasta que veamos un suelo" explica el director de análisis de renta variable de Singular Bank, Nicolás López, en Hora 25 de los Negocios.

...y Black Friday en el comercio

Por otro lado, este Black Friday, en términos comerciales, se prevé más animado que el del año pasado en cuanto a compras... aunque con descuentos más bajos porque la mejora de la situación económica y el hecho de que haya menos restricciones que el año pasado llevan a pensar que para los vendedores el de este año va a ser una jornada con más ventas. Así, la OCU calcula que serán un 77% de los españoles los que compren en esta fecha y que más de la mitad tienen pensado gastar más de 200 euros, un 25% más que el año pasado. Y esto, pese a que, según esta organización de consumidores los precios serán durante esta campaña un 3,3% más elevados que hace tan solo un mes. "Entre los productos que con más frecuencia subieron sus precios destacan los ordenadores, las impresoras, los altavoces portátiles y los hornos, aunque lo normal es que dentro de una misma categoría lo normal es que haya tantos productos que suben de precio como los que bajan" apunta su portavoz, Manuel Vivas.

Además, este año las tiendas y los estudios dicen que los descuentos están siendo más pequeños porque, según explican desde la Confederación Española de Comercio, los costes para los productores y vendedores están subiendo y que hay retrasos en la llegada de algunos productos y sus márgenes ya se ven muy reducidos sin descuentos adicionales. "Estimamos que el nivel de participación del pequeño comercio será inferior al de años anteriores, principalmente por el contexto en que nos encontramos, con importantes sobrecostes, derivados de la subida del precio de la luz, los combustibles o las materias primas, entre otros factores, y dado el reducido margen que tienen para la aplicación de descuentos. Y prevemos que los comercios que sí se adhieran a esta campaña lo hagan con descuentos menos agresivos" apunta Julián Ruiz, Secretario General de CEC.

"La posibilidad de comprar vía omnicanal, es decir, de forma presencial y de forma electrónica, sobre todo, en la vía electrónica, saltamos las restricciones de movimientos. La ventas de carácter interpersonal sí que podrían sufrir algún descenso, pero a mi me da la sensación de que cada vez se compra más a través de plataformas online" apunta en Hora 25 de los Negocios Gaietà García, profesor de EAE Business School, que considera que el Black Friday no es el mejor momento para realizar las compras. "El mejor momento depende de la necesidad de cada uno de los consumidores" defiende.