Carlos Bravo: "Se avecina un verano potente"

La Rioja

Las altas temperaturas nos recuerdan que el verano está a la vuelta de la esquina y no hay verano sin fiestas. En realidad sí. La pandemia lo ha dejado claro, sin embargo, en este 2022, la normalidad, la que había en el año 2019, parece que vuelve a reinar.

Los municipios riojanos ya preparan todas las actividades para volver a disfrutar de unos días festivos. Los ayuntamientos se encuentran inmersos en la contratación de los diferentes espectáculos.

En Calahorra, el consistorio ya tiene todo preparado para las fiestas de agosto, que se celebrarán del 25 al 31 de agosto. Para los festejos mayores, el equipo de gobierno asegura tener "todo preparado". Antonio León, concejal de Festejos explica que en este 2022 "se recuperarán los conciertos que estaban programados en 2020". Así, el artista Nil Moliner pisará Calahorra pero también lo hará Dancetería, el grupo formado por Miss Caffeína y Varry Brava. Otro de los platos fuertes para las fiestas de Calahorra, musicalmente hablando, serán las orquestas. El consistorio cuenta con dos, una de ellas, con una veintena de personas sobre el escenario.

Vuelven las orquestas y verbenas

Y en este 2022 volverán las orquestas y verbenas musicales a los municipios riojanos. "Se está trabajando con toda normalidad", explica Carlos Bravo, gerente de Bravo Producciones. A juzgar por cómo se están comportando los últimos eventos, Bravo, augura un verano "muy potente". Explica que la gente tiene muchísimas ganas.

Tras dos años sin ingresos, el sector del espectáculo ve el año 2022 como un balón de oxígeno. "Han sido años muy duros pero por fortuna esos tiempos ya han pasado. Los ayuntamientos ya están organizando las fiestas. Habrá verbenas, orquestas y algún espectáculo más que se ha quedado tras la pandemia". Sin embargo, Bravo asegura que muchas orquestas no han podido resistir la pandemia y que han decidido cambiar su rumbo. Es el caso de la orquesta calagurritana, Nuevo Talismán. José Antonio León, uno de sus integrantes, explica que "la pandemia ha supuesto un antes y un después para todo el sector. Hemos sido los más castigados en esta pandemia a nivel 100".

José Antonio y su hermano Ángel llevan muchos años en la profesión, muchos kilómetros a sus espaldas y muchas localidades recorridas. Decidieron compaginar el trabajo de la orquesta (antes de la pandemia) con la representación de artistas y la pandemia "ha acelerado el proceso y nos dedicamos a la representación".

A diferencia que Carlos Bravo, José Antonio reconoce que se está trabajando más que en el año 2020. "Es muy fácil trabajar más que en esos años pero no es suficiente". Asegura que el sector "está muy tocado" y que ahora los representantes políticos y los ayuntamientos tienen el poder de volver a hacer brillar a un sector, que ha estado completamente parado, mientras el Covid19 era el protagonista de la vida.