El clúster de la automoción alerta del "peligro" de perder una industria "fundamental" en La Rioja
Las 18 empresas del clúster deben afrontar el incremento de hasta un 300% en la factura de la electricidad, lo que supone alrededor de 12 millones de euros al año
Logroño
El clúster de la automoción en La Rioja advierte de que la "viabilidad del sector en La Rioja está comprometida" por las actuales circunstancias, que están dificultando enormemente la actividad de una sector fundamental para la economía de la comunidad. Al incremento de los precios de materias primas, la escasez de suministros o el aumento de los costes derivados del transporte se añade ahora un nuevo contratiempo. El nuevo contrato del suministro de la electricidad, que entra en vigor el 1 de julio, "va a suponer un aumento del precio de entre un 250% y un 300%", señala Daniel Rueda, coordinador general del clúster. En términos absolutos, este incremento va a suponer que la factura de la electricidad pase de 6 a 18 millones de euros.
2.400 trabajadores y 300 millones de facturación
El clúster de la automoción en La Rioja consta de 18 industriales y otras 8 colaboradoras, con una facturación conjunta que alcanza la cifra de 300 millones de euros al año para dar empleo directo a 2.400 trabajadores y otros 5.000 más de manera indirecta. El nuevo contrato para el suministro de la electricidad supone "incrementar nuestros costes en 12 millones de euros al año, una cantidad, para que nos hagamos una idea, con la que podríamos contratar a 325 trabajadores, es decir, el 15% de nuestra actual plantilla", señala rueda
A las materias primeras y los costes logísticos se añade ahora el aumento "desmesurado" del precio de la electricidad. Y todo ello en un contexto desfavorable del mercado de venta de vehículos nuevos. La producción de vehículos ha bajado un 25% respecto a 2019 y un 7,5% sobre 2020, que fue un año para olvidar. Y los datos del actual ejercicio tampoco invitan al optimismo.
Pérdida de una industria muy potente
Desde el clúster de la automoción piden "medidas urgentes" para atajar una caída sin precedentes del conjunto de la industria en nuestro país con una graves consecuencias económicas y sociales. El sector aporta el 8,5% de la riqueza nacional y da empleo a más de 2 millones de personas.
"Las medidas que están en nuestra mano pasan por la flexibilidad y la economía de escala", destaca rueda. Los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) están permitiendo mantener el empleo y compensar la caída de la producción. A ello añaden la suma de esfuerzos para evitar pérdidas. "No hablamos de beneficios sino evitar pérdidas".
Y esta "tormenta perfecta" que sacude al sector deja atrás las tan ansiadas previsiones de recuperación. "Todas nuestras previsiones se ven aplazadas una y otra vez ante una coyuntura marcada por la incertidumbre y las malas perspectivas económicas. Ante esto debemos aunar esfuerzos. No queda otra", reitera Rueda.