Uno de cada cinco alumnos de tercero de la ESO ha repetido curso

'Repetir no es aprender' es el nombre del estudio de Save The Children en el que aseguran que el abuso de la repetición de curso en los colegios e institutos españoles está perjudicando al alumnado, sobre todo al de bajo nivel socioeconómico. Así lo asegura esta entidad en un estudio en el que remarcan que la tasa de repetición de curso de España duplica la de Italia, cuadruplica las de Irlanda, es 8 veces las de Finlandia y Suecia y 11 veces mayor que Reino Unido.

En cuanto a los datos de nuestra comunidad, la Tasa de Idoneidad, que marca qué porcentaje de alumnos se encuentra matriculado en el curso que por su edad le corresponde, apunta a que, en tercero de la eso, un 28 por ciento de los alumnos ha repetido algún curso. "Es un porcentaje muy alto", asegura el director general de Innovación Educativa, Alberto Abad. Aunque es una cifra similar a la del resto del país.

Una situación que quiere revertir la modificación de la ley de educación que considear la repetición de curso como una medida de caracter excepcional y que deja de considerar el número de suspensos como criterio determinante a la hora de repetir curso. Abad reconoce que "como apunta el estudio, repetir curso no es la mejor herramienta para abordar el fracaso escolar". Por ello, desde Educación y con la aplicación del cambio legislativo, "la incención es que poco a poco provoquemos que el alumnado que ha tenido que repetir o que ha pasado con materias pendientes no se encuentre con exactamente lo mismo, porque volverá a fracasar".

Efectos económicos

El informe de Save The Children también apunta a que las repeticiones son una herramienta con "nulo efecto positivo y elevado coste" porlo que tildan la repetición como una medida "muy ineficiente". Entre los datos resaltan que tomando los datos del curso 2019-2020, donde 234.500 estudiantes repiten, los costes directos de la repetición se elevan a 1.441 millones de euros, lo que supone un 6,2% del gasto público en educación primaria y secundaria obligatoria (el equivalente al presupuesto de educación de todas las islas Canarias).

Desde la entidad proponen comparativas para apostar por mejoras educativas y con el mismo coste. Algunas de ellas pasarían por: Refuerzo extraescolar en grupo pequeño para 2.217.000 estudiantes (el 47% del total en primaria y ESO en centros públicos y concertados), 44.700 docentes extra para co-docencia, agrupamientos flexibles o estrategias de diferenciación en el aula (el 6% de incremento sobre las plantillas actuales), 2 formadores-mentores para cada uno de los 17.881 centros públicos y concertados de primaria y ESO para acompañar a equipos docentes en la experimentación, reflexión y cambio de prácticas, 42.200 orientadores y trabajadores sociales más para identificación y seguimiento a alumnado en riesgo.