Cuando el Diablo fracasó en el intento de tirar abajo la campana de Urdanta
Los campaneros riojanos celebran la declaración del toque manual de campanas como patrimonio de la humanidad
Cuando el Diablo fracasó en el intento de tirar abajo la campana de Urdanta
Logroño
La UNESCO ha incluido en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial el toque manual de campanas, una candidatura que comenzó a fraguarse en España en el año 2017 desde Hispania Nostra, Campaners d’Albaida y MitMac. En nuestra comunidad autónoma existen grupos como Campaneros del Alto Oja que se encargan de preservar esta tradición.
Gonzalo Abajo forma parte Campaneros del Alto Oja y explica que las campanas forman parte de nuestro mapa sonoro. Y es que el Toque de Campanas ha sido un medio de comunicación cargado de emociones, un lenguaje universal, las campanas hablan de todo y para todos. "Servían hasta para delimitar los municipios", cuenta. Y es que el lugar donde se dejaba de escuchar un campanario y se comenzaba a oír el siguiente era, en ocasiones, el límite de un pueblo.
En cuanto a los mensajes que se transmitían con las campanas, están los litúrgicos con las llamadas a misa, los anunciamientos de muertes o nacimientos, los toques que alertaban de tormentas o de incendios...Además, dependiendo de la actividad de la parroquia o si había un monasterio, las campanas marcaban el paso del tiempo desde el amanecer hasta el anochecer, desde maitines o las vísperas.
La boina y el diablo
La campana de Urdanta tiene un soporte que parece una cara. Dicen los mayores de la localidad que esa cara es el rostro del diablo, que una vez intentó tirar la campana más grande de la iglesia, conocida como La garbancera. Pese al esfuerzo de Lucifer por acabar con la campana, ésta resistió y el maligno solo pudo dejar su rostro marcado en el campanario. "Eso contaban los mayores a los niños", explica Gonzalo Abajo, que dice que era una fascinación para los más pequeños. Aunque, reconoce, es un contrapeso para el funcionamiento de la campana.
Pese a que Satán no pudo con la campana de Urdanta, sí hubo quién rompió la campana de su pueblo. Eso cuenta otra leyenda de Zaldierna. En este caso un vecino armado con una boina. La historia relata como este vecino, con la boina a la cabeza, estaba tocando las campanas, cuando en un momento la boina salió disparada impactando contra la campana y resquebrajándola. "La historia se repite en otros pueblos de Burgos". Las campanas son metálicas, pero esta historia muestra como son vulnerables cuando están vibrando.
Este sábado día 3 de diciembre a las 12:00h muchos municipios de toda España han celebrado esta declaración de Patrimonio Mundial por la UNESCO, con un gran toque de campanas a nivel nacional en aquellos lugares que conservan o han recuperado el Toque Manual.