Los colectivos vulnerables ante la nueva movilidad

Logroño

A punto de concluir la legislatura seguramente uno de los aspectos que más trascenderá del actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Logroño será la profunda transformación que ha experimentado el modelo de movilidad urbana. Sea en positivo, con importantes reconocimientos en el ámbito nacional, o en negativo, porque voces críticas tampoco han faltado, lo que nadie puede poner en duda es esa transformación que hoy mismo tiene sumidas en obras, en profundos cambios a muchas zonas de la ciudad.

Hoy les hemos propuesto un profundo análisis, no solo del caso de Logroño, sino en general de la nueva movilidad, un reto prioritario para cualquier ciudad por la incidencia que esa movilidad tiene para el cambio climático, para la salud física y mental de las personas, para la convivencia entre los ciudadanos y para la necesaria compatibilidad entre peatones, coches, transporte urbano, bicicletas, vehículos de movilidad personal...

Para ello hemos contado con responsable municipales directamente implicados en ese modelo, con expertos que ya han desarrollado experiencias de éxito en otras ciudades españolas, como por ejemplo Barcelona, y también con representantes de colectivos especialmente vulnerables a una movilidad inadecuada. Y hablamos de personas mayores, de personas con discapacidad, de entornos escolares o simplemente de entidades que abogan por una fórmula más sostenible, con unas ciudades en las que los peatones y los medios de transporte no contaminantes sean los grandes protagonistas.

En la mesa redonda que ha cerrado este programa especial, Javier Muñoz, secretario general de CERMI-Rioja ha explicado que para su colectivo “es un cambio drástico. Es verdad que se están produciendo situaciones difíciles en lugares concretos, como en algunas calles que se quieren hacer más peatonales, pero para nosotros, hasta que esos proyectos se culminen, es muy complicado moverse por la ciudad. Y sobre todo, algo muy importante, eso tan bonito y de diseño como la cota cero a las personas con discapacidad no nos viene nada bien”.

Teresa Angulo, de Ciudades Cuidadas, asegura que “es un cambio en el modelo de ciudad realmente necesario, no solo para las personas vulnerables, y todo en todo cambio de modelo hay muchas cosas que mejorar y hay que seguir trabajando y avanzando para que realmente no haya barreras para nadie”.

Esteban García, secretario general de FAPA, explica que “en 2020 plantearon un cuestionario a las familias sobre cómo querían que fueran los entornos escolares, y un alto grado quería ir andando, en bici o en patinete, de forma tranquila. Todo lo que se haga para conseguir eso es positivo, por eso hay que dialogar. Para las familias, cualquier entorno que sea seguro, mejora su calidad de vida y la de la ciudad”.

Por último, Saturnino Álvarez, de la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados, considera que la movilidad es una barrera más para las personas mayores. Entiendo que los cambios son necesarios desde el punto de vista ecológico y demás, pero a los mayores nos pillan un poco a contrapié. Ha habido falta de información y eso nos hace sentirnos un poco preocupados ante tantos cambios. Hay cosas muy interesantes y cosas que se podrían hacer de otra manera porque la gente mayor está preocupada y un poco asustada”.