"Poner la denuncia es el mayor acto de amor que se hace por un hijo, el intentar reconducirlo"
La Rioja contabilizó 65 casos de violencia filioparental en 2022
Entrevista con Carmen, madre que sufrió violencia filioparental (16/03/2023)
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La violencia filioparental es un problema del que nos alertan desde la Oficina de la Víctima del Delito de La Rioja, donde están preocupados por estos casos, aunque representan el 10% por ciento de todos los que atendieron en 2022. En concreto, fueron 65 casos en La Rioja de los que 30 se dieron con mayores de edad, 10 con niños menores de edad, y lo otros 25 fueron a la inversa: de violencia de padres a hijos.
Detrás de estos fríos datos, siempre hay casos de personas que han vivido, y siguen viviendo, un auténtico calvario. Como la familia de Carmen, el nombre ficticio que hemos elegido para esta contar lo que es un duro camino para toda la familia. No entendían cómo podía pasar algo así a una familia normalizada como la suya, una pareja trabajadora casada desde hace treinta años y con otra hija que estudia en la universidad.
Todo comenzó cuando su hija pequeña tenía siete años. Le diagnosticaron déficit de atención e hiperactividad. Y los comportamientos anómalos y la impulsividad se incrementaron en la adolescencia. Ya con doce años comenzaron los problemas.
"Le dices ven a las diez a casa si has salido con amigos y si no quiere no viene hasta el día siguiente. Y con catorce años no venir una noche. Y el gran problema es que, cuando venía o la encontrábamos a través de la policía, ella no venía avergonzada o retraída. Ella venía con una actitud soberbia y nos decía que cuando mejor asumiéramos que iba a hacer lo que quisiera, mejor para nosotros".
El detonante, un cuchillo en el cuello
Pero el detonante ocurrió cuando tenia 15 años y una noche se enfrentó a sus padres porque quería salir de noche. Hizo una mención de agredir a su madre y esta le dijo: "A mí no me agredas que eso es un paso sin retorno, una línea de la que no vas a pasar". Sin embargo, su hija, después de un rato, le puso un cuchillo en el cuello. "Si te agredo con el cuchillo, ¿me puedo ir?", le dijo su hija. "No, no te vas a poder ir de ninguna de las maneras", le dijo Carmen. Ese es el momento en el que los padres se dan cuenta de que "no está bien, que está muy desequilibrada y que es inminente un peligro para ella o para los que estamos alrededor".
Carmen relata cómo su otra hija esa noche se fue a casa de unos amigos por temor a su hermana. Fue entonces cuando decidieron dar un paso más y presentar una denuncia en la policía local. A partir de ese momento se puso en marcha la maquinaria para que ingresara en el centro Valvanera de Logroño.
Un duro camino para todos
Afirma que esta medida "nos alivió muchísimo. A mí no me parecía ético que entrara en un piso tutelado, que fue una de las opciones que me dieron, porque el peligro que yo no quería en mi casa para mí o para mi hija tampoco lo quería para ningún trabajador de los pisos tutelados. En los pisos hay cuchillos a su alcance, tienen acceso a la cocina. Y por eso, en una situación tan desquiciada de mi hija, creo que tenía que estar muchísimo más controlada".
Ahora, un año y medio después y tras estar ingresada en el centro de menores Valvanera, ha vuelto al domicilio familiar y está en libertad vigilada y nos cuenta su madre, "es otra persona". "Han trabajado muchísimo con ella. Ella ahora está en casa, está completamente cambiada, puedes hablar con ella y puedes razonar con ella. Por supuesto que sigue intentando saltarse las normas. También vamos a entender que tiene 16 años, es un proceso adolescente en su caso muy acentuado, hormonalmente muy activo pero es otra persona", finaliza.
Ayudar a otras familias
Carmen cuenta su historia porque no tiene nada de qué avergonzarse. Así lo dice ella y también nos da su testimonio porque su fortaleza puede ayudar a muchas otras familias que están sufriendo este calvario porque hay solución.
"Al final acaban mandando ellos y eso no les beneficia. No van por un buen camino. Es muy duro buscar a alguien que os acompañe, que os informe porque hay solución. Y la solución pasa por que Vosotros os cuidéis, estéis enteros, estéis bien y tengáis claro que esta situación no hay que aguantarla. Nunca, nunca hay que aguantar que nadie te agreda, en ninguna circunstancia. Hay recursos para que os ayuden a ayudar a vuestros hijos. Y el poner la denuncia es el mayor acto de amor que se hace por un hijo, el intentar reconducirlo".
Recursos en La Rioja
Lo importante es que existen recursos en La Rioja para dar respuesta a estos casos. "Existen programas tanto en medio abierto, como el programa reencuentro como los menores que están internados en el centro de reforma para tratar de ayudarles, a ellos y a sus familias, a encontrar mecanismos que permitan esa reinserción. Un fenómeno que es preocupante pero en el que también existen medios y formas de salir", afirma el director general de interior, Jorge Medel.
Y también insistía en esto Belén Maiso, psicóloga encargada de la ejecución de medidas para menores infractores. "Trabajando individualmente con el chico sobre todo en la línea de que vaya asumiendo la realidad, conectando con las emociones de sus padres y asumiendo la violencia, porque normalmente hay mucha minimización de la situación. Con los padres para empoderarles, desculpabilizarles e implicarles en el proceso de generar una dinámica diferente con el hijo".
El Gobierno de La Rioja y la Fundación Diagrama han puesto en marcha el teléfono de atención permanente 'Ayúdale ayudándote', que ofrece asesoramiento e información a padres, tutores y familiares que sufren violencia por parte de sus hijos o menores y jóvenes con los que convivan.
El teléfono 696 121 212 está operativo las 24 horas al día, los 365 días al año.