Una sepultura con aires egipcios, una tumba fuera del cementerio y un entierro de pie
Repasamos la historia y los enterramientos de 'El ruso', 'El guindilla' y 'El enamorado'
Una sepultura con aires egipcios, una tumba fuera del cementerio y un entierro de pie en La Rioja
Fernando Gallego 'El Ruso' fue un inventor, aviador e ingeniero castellano que descansa en paz en el cementerio de Logroño. Su enterramiento, en el que yace junto a su esposa, es el más singular del campo santo de la capital. Fernando Gallego siempre quiso destacar, también con su tumba, que fue diseñada por él mismo. Como no podía construir el panteón más ancho, lo hizo con la altura. Su tumba mide unos ocho metros de alto. El diseño también es llamativo, fruto de sus viajes al rededor del mundo y con influencia egipcia.
Enterrado fuera del cementerio
"Aquí delante yace Ciriaco Fernández 'El Guindilla. Dios lo tenga en su alma", así reza la placa que ubica la tumba de Ciriaco Fernández en Santa Lucía de Ocón. La placa se encuentra colocada en el muro del cementerio, por lo que su sepultura está fuera y no dentro del campo santo. La razón de este curioso enterramiento es el atroz crimen que 'el guindilla' había cometido. Ciriaco Fernández acabó con la vida de cinco personas y llegó incluso a disparar al alcalde de la localidad (por suerte erró su disparo y solo le dio en el sombrero). Un crimen ocurrido en 1885 y que alguien convirtió en un romance en el año 1.958.
La única tumba vertical
"El sr. José Mauleón y Gimenez. Falleció el día 11 de enero de 1869 a los 28 años de edad. RIP". Es lo que se puede leer en la tumba de José, que José procedía de una familia acaudalada. El joven estaba enamorado de una sirvienta de la familia Sáenz de Heredia, por lo que, en aquellos tiempos, se trataba de un amor imposible. La chica murió joven y él, no pudiendo aguantar la pena por su pérdida, también falleció al poco tiempo. Eso sí, antes de morir, el amante dejó escrito que debían enterrarlo mirando hacia donde yacía la mujer de sus sueños. Por ello lo pusieron de pie, ya que echado no podía cumplirse la última voluntad de un muerto. Su familia cumplió sus deseos y preparó para el joven una tumba vertical de mármol que colocó frente al mausoleo de la familia Sáenz de Heredia, donde ella está enterrada. Así es como una historia trágica de amor desencadenó un elemento único en los cementerios de España.