La presa de Enciso en la recta final

Enciso

La presa de Enciso está cada vez más cerca para entrar en explotación. Tras más de medio año de vaciado, a fecha de hoy, esta infraestructura está casi vacía. "Quedan aproximadamente 2 hectómetros", dice Julián Brihuega, Jefe de explotación en el Eje del Ebro. Ahora, es momento de evaluar y realizar los informes pertinentes para comprobar que la duodécima fase se ha completado con éxito. Y es que desde que se terminaran las obras, allá por el 2018, la presa se ha sometido a diferentes fases de prueba. "El ritmo de las precipitaciones han determinado el tiempo empleado", explica Brihuega.

Ahora, una vez concluidos los informes, la presa ha de volver a llenarse, algo que también dependerá de las lluvias. "A partir de ahí entrará en fase de explotación y podrá cumplir los objetivos". Objetivos primordiales que pasan por garantizar el agua de boca a una población de cerca de 70.000 habitantes de La Rioja Baja y por proporcionar agua para el riego. "Estamos en fase de estudio con el Gobierno de La Rioja para intentar ampliar las hectáreas que se beneficiarán del regadío", avanza el Jefe de explotación del Eje del Ebro. Mientras tanto las gestiones no cesan y ahora según informa el responsable "se está conformando la Junta Central del Cidacos, que será el órgano interlocutor con la administración para poder gestionar la presa". Señala Brihuega que, "si todo va sobre lo previsto se podría empezar a embalsar agua, procedente de caudales, en el mes de marzo".

Eje del Ebro

Durante este verano, el vaciado de la presa de Enciso ha permitido proporcionar agua la cuenca del Cidacos y a sus municipios, en un año hidrológico, especialmente complicado marcado por la sequía. Aunque es muy pronto para especular y hacer previsiones de cómo se comportará el año en curso, Brihuega explica que, el Eje del Ebro se ha recuperado en parte, por las últimas precipitaciones aunque el embalse cabecera, el de Reinosa, sigue preocupando.