Isabel Ilzarbe: "Lo único que podemos hacer con la prostitución es abolirla"

Logroño

Este domingo 17 de diciembre es el Día Internacional para poner fin a la violencia contra las trabajadoras sexuales. En La Rioja se calcula que puede haber un millar de mujeres ejerciendo la prostitución y alrededor de 60 pisos solo en la capital. "Puede haber muchos más", dice Isabel Ilzarbe, de la Asociación Feminista Kirké, remarcando que esa cifra solo son los pisos a los que se ha podido acceder. "Puede haber otros pisos que no se han localizado o no se han permitido el acceso a las ONGs que trabajan con estas mujeres. Es una actividad muy difícil de localizar si no están localizadas en un club".

Explica que, desde el punto de vista del feminismo, la prostitución en sí misma es una forma de violencia contra las mujeres, ya que presupone que el cuerpo de la mujer es un objeto mercantilizable que se puede comprar, vender, alquilar y sobre el que se puede ejercer todo tipo de violencia previo pago.

Ilzarbe asegura que la prostitución "no es un trabajo, es una forma de esclavitud y es una forma de violencia" y que "lo único que podemos hacer es abolirla".

Tres posturas diferenciadas

En la actualidad conviven tres posturas frente a la prostitución: la prohibicionista, que acaba persiguiendo a las mujeres prostituidas; la regulacionista fomentada por proxenetas y puteros para legitimar y perpetuar su enriquecimiento a costa de la explotación sexual de las mujeres; y la abolicionista. "Regular esta situación ya ha demostrado, en los países que se ha hecho, que no resuelve problemas como la trata y no resuelve problemas relacionados con mujeres que anteriormente han sido víctimas de la violencia sexual, por ejemplo, en el ámbito de su pareja y que acaban abocadas a este mundo y a tener que vender sus cuerpos", dice.

Sin embargo, apunta Ilzarbe, "la abolición pone el foco en el putero, en la persona que consume prostitución y en el proxeneta, la persona que facilita el acceso a ese consumo. Esos serían los que estarían perseguidos porque facilitan que se ejerza la prostitución y a las mujeres víctimas se les garantizaría una protección y una vía de salida para que tengan una vida digna".

Red de apoyo

Y para que esa salida se materialice, apunta que la primera premisa es tener una "red de apoyo garantizada y fuerte, que funcione para detectar posibles casos de trata, para poder ofrecerles un apoyo desde las instituciones para resolver cuestiones administrativas y facilitarles una ayuda psicosocial. "Porque ni ellas son conscientes de la violencia que han estado soportando". Una ayuda que apunta Ilzarbe que "tenemos asumida con las víctimas de violencia de género pero no con las víctimas del sistema prostitucional".

Ordenanza en Logroño

El próximo año Logroño redactará una ordenanza para que la capital sea una ciudad libre de prostitución. Una iniciativa del Partido Riojano que salió adelante en el último pleno de noviembre con el voto en contra de Vox, la abstención del PP y el apoyo del PSOE, Podemos-IU y PR+. "El objetivo es que la población tome conciencia de que la prostitución es violencia contra la mujer. Y no podemos mirar a otro lado", apunta el concejal Rubén Antoñanzas.

"Para nosotras es un gran paso, un paso de gigante" y era "muy necesaria". "Creemos que falta concienciación sobre la problemática que supone la prostitución. Y creemos que durante la redacción de esta ordenanza, todos los que luchamos frente a este tipo de violencia, vamos a tener una oportunidad magnífica de llegar a la población, ser muy didácticos, y llegar a un punto que la gente entienda que esto es una forma de violencia".