Alerta blanquirroja

La Rioja

De mal en peor. La derrota por 0-2 de la SD Logroñés ante el Teruel deja a los blanquirrojos en una situación crítica. En una línea, las sensaciones que transmitieron los de Aitor Larrazabal fueron aún más preocupantes que el marcador. Y eso es mucho decir. Ni con 0-0, ni con 0-1, ni con 0-2. La SD Logroñés pasó de puntillas por el partido y para colmo le abrió el camino a su rival. Un Teruel que sueña con una salvación que parecía utópica hace unas semanas. A la espera de que se disputen los partidos del domingo, la SD Logroñés podría quedarse a tres puntos de la salvación en el mejor de los caso y a seis en el peor de los escenarios.

Una semana más, las opciones blanquirrojas de aguantar el pulso por la salvación pasan por lo que hagan los demás. El dato es frío: la SD Logroñés ha perdido 16 partidos en 27 jornadas. El equipo riojano ha perdido ocho de los catorce partidos que ha disputado como local y ya es habitual que al final del encuentro sonrían más los visitantes que los locales. La victoria de hace dos semanas ante el Arenteiro fue una balsa de aceite dentro de la tempestad blanquirroja. Tal ha sido el encuentro ante el Teruel que parte de la afición de la SD Logroñés ha despedido al equipo con pitos al término del encuentro. No les han faltado motivos para ello.

Pese a que los dos equipos se jugaban la vida deportiva, unos demostraron más templanza que otros. Aunque en este caso fue la incapacidad de la SD Logroñés y no sus nervios los que atenazaron por completo a los de Larrazabal. Con Dani Garrido como única vía de escape en salida de balón, el mediapunta logroñés no sabía a quién dársela cuando tenía la pelota en los pies. El Teruel se asomaba cada vez con más frecuencia a la meta de Oriol Martí y las dinámicas de unos y otros se hicieron palpables en el césped del Municipal.

En el 32', el marcador dejó de sostener a una SD Logroñés inoperante. Tena envió un balón al área que Salado introdujo dentro de su propia portería para perplejidad de la zaga blanquirroja. Tiro en el pie de los que pueden decantar un partido. Tras el paso por los vestuarios, Óscar Fernández entró en lugar de Ferni para encontrar una profundidad poco frecuente en el primer acto. El '7' lo intentó como habitualmente pero el Teruel seguía encontrándose muy cómodo en el partido. Los aragoneses, espoleados por más de un centenar de seguidores, mataron el choque en el 68'.

Aitor Pascual puso un centro medido al área desde la derecha que Borja Martínez cabeceó a gol. El máximo goleador del Teruel martilleó el esférico sobre la portería de un Oriol Martí que no ha podido hacer absolutamente nada en los tres goles que ha encajado este curso. Tras el 0-2, la SD Logroñés bajó los brazos por completo y el Teruel estuvo a punto de marcar el 0-3. De libre directo, Oriol Martí le sacó a Aitor Pascual un balón de la mismísima escuadra. Poco antes, Óscar Fernández tuvo en sus botas la ocasión riojana más clara del encuentro pero Konate salió ganador del duelo. Las matemáticas aún le dan vida a una SD Logroñés que debe ganar en Las Llanas para seguir creyendo en la salvación.

SD Logroñés (0): Oriol Martí; Gexan Elosegi, Adrián Trespalacios, Jon Aurtenetxe, Jaime Paredes; Curro Muñoz (Javi Castellano, 62'), Antonio Salado; Ferni (Óscar Fernández, 46') Dani Garrido (Alessio Miceli, 76'), Manny Rodríguez (Fabián Luzzi, 62'); Álex Jaráiz (Marc André Schmerböck, 76').

CD Teruel (2): Taliby Konate; Aitor Pascual, Arnau Gaixas, Ismael Sierra, Julen Hualde; Borja Romero (Facu García, 84') Fran Tena; David Aparicio, Nacho Castillo, Borja Martínez (June-Hyuk Ahn, 82'); Toni Gabarre (Guillem Naranjo, 64').

Goles: 0-1: Antonio Salado (en propia puerta, 32'); 0-2: Borja Martínez (68').

Árbitro: Fernández Buergo (comité asturiano). Amonestó a Jaime Paredes, Ferni y Alessio Miceli por parte de la SD Logroñés y a David Aparicio, Toni Gabarre, Ismael Sierra y Borja Martínez en el CD Teruel.

Incidencias: Partido correspondiente a la 27ª jornada de liga en el Grupo 1 de Primera Federación disputado en el Estadio Municipal de Las Gaunas frente a 1.463 espectadores.