Detenidos 4 empleados de Guadalajara por robar 7,3 kilómetros de cable en varios municipios de La Rioja
Pertenecen a una empresa de telecomunicaciones manchega y están acusados de ser los autores de seis delitos de hurto en cuatro municipios riojanos
Detenidos 4 empleados de Guadalajara por robar 7,3 kilómetros de cable en varios municipios de La Rioja
Logroño
La Guardia Civil en La Rioja ha detenido en Logroño a cuatro trabajadores de una empresa de telecomunicaciones de Guadalajara como presuntos autores de seis delitos de hurto de 7,3 kilómetros de cable de telefonía, perpetrados en las líneas aéreas de los municipios riojanos de Agoncillo, Albelda de Iregua, Nalda y Hormilleja.
Los implicados en estos hechos, de entre 45 y 60 años, se desplazaron a La Rioja para instalar líneas aéreas de fibra óptica en diferentes municipios de la comunidad. Los detenidos utilizaron sus conocimientos y su actividad profesional para sustraer cable de telefonía y arrancaron, en sus seis acciones delictivas, 7.360 metros de cable, valorados en 44.624 euros, lo que afectó gravemente las comunicaciones en zonas rurales y dejó a numerosos ciudadanos incomunicados durante varias horas.
Entrevista con Miguel Ángel Sáez, portavoz de la Guardia Civil en La Rioja (14/11/2024)
Operación Roncele
Esta operación, denominada 'Roncele', se inició tras la presentación de seis denuncias por robos de cable de cobre de telefonía en varios municipios de La Rioja, ocurridos entre el 2 y el 24 de octubre pasados.
Los agentes, durante su investigación, determinaron que las sustracciones habían sido realizadas por trabajadores o extrabajadores de empresas dedicadas al montaje y mantenimiento de líneas aéreas de telecomunicaciones, dado que se utilizaron herramientas específicas para cortar el cable. Ello se constató tras hallarse ocultos entre la maleza 550 kilos de cable pelado, dispuestos en fardos para su venta.
La Guardia Civil centró su actuación en cuatro empleados de una empresa de Guadalajara que habían acudido a La Rioja para instalar fibra óptica, por lo que fueron sometidos a una vigilancia discreta.
Se constató que aprovechaban su jornada laboral para sustraer de manera coordinada y conjunta el cable de telefonía, que después vendían en un centro de reciclaje de Logroño, donde entregaron 1.870 kilos de cobre y por los que recibieron 4.891 euros. Este hecho condujo a la detención de los implicados, que fueron puestos a disposición judicial.
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