Control del pelo en champiñón: la dosis recomendada es de 2 ml/m²
El fungicida podrá aplicarse hasta el 31 de diciembre como medida preventiva, con un plazo de seguridad de 10 días
A pie de Campo (18/11/2024)
07:52
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La Rioja
El Gobierno de La Rioja ha obtenido la autorización excepcional del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para el uso y comercialización de productos fitosanitarios basados en fluxapyroxad en el cultivo del champiñón. Esta medida busca combatir la enfermedad conocida como "el pelo" , que en los últimos años ha provocado pérdidas significativas en las explotaciones de la región, con reducciones de rendimiento del 10 al 15% en 2023.
Según Allende Martínez, ingeniera técnico agrícola y responsable del espacio 'A pie de campo', el pelo “afecta a la cantidad del champiñón, generando importantes pérdidas económicas. La situación se complicó tras la retirada de otro fungicida, dejando como única herramienta la metrafenona, que actualmente muestra muchas resistencias frente a esta enfermedad”. El fluxapyroxad, sustancia activa de amplio espectro, ha demostrado eficacia no solo contra el pelo, sino también contra la mole en pruebas realizadas por el Centro Tecnológico del Champiñón de La Rioja (CTICH). Sin embargo, esta autorización tiene carácter temporal, permitiendo su uso únicamente hasta el 31 de diciembre de 2024.
Alternancia para prevenir resistencias
Martínez subraya la importancia de alternar este fungicida con la metrafenona: “Si solo utilizamos una de las herramientas, fomentaremos resistencias, por lo que es importante buscar esta alternancia para evitar un mal uso”.
Además, la ingeniera advierte que el fluxapyroxad es un producto preventivo. "La dosis recomendada es de 2 mililitros por metro cuadrado y un plazo de seguridad de 10 días".
Perspectivas futuras
El Gobierno de La Rioja ya contempla la posibilidad de solicitar una nueva autorización excepcional para 2025, aunque el periodo de aplicación aún no está definido. “Será necesario ajustar esta solicitud a los momentos de mayor necesidad en las explotaciones”, señala Martínez.
Asegura Martínez, que "la inclusión de este producto supone un alivio para los cultivadores" y que, "su registro en otros cultivos nos da garantías sobre su seguridad y compatibilidad con otros productos usados en el champiñón, como el Bacillus subtilis”, concluye Martínez.
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