La Rioja estudia ampliar de 40 a 42 años la edad máxima para tratamientos de fertilidad

La Rioja

La Rioja está entre las regiones peor situadas de Europa, con una tasa de 6,18 nacimientos por cada mil habitantes. Para entender la magnitud de este descenso, basta comparar este dato con el año 1976, cuando comenzaron los registros, y la tasa era del 17,41. El declive, que comenzó en los años 80, se ha consolidado año tras año, evidenciando la necesidad de medidas que impulsen la natalidad. En este contexto, el presidente del Gobierno de La Rioja, Gonzalo Capellán, propuso en el último pleno del Parlamento regional una medida que ya se aplica en algunas comunidades autónomas: la ampliación de la edad máxima para acceder a tratamientos de fertilidad en la sanidad pública.

Nuevas oportunidades

La jefa de la Unidad de Ginecología y Obstetricia del Hospital San Pedro, María José Puente, asegura que esta propuesta está en estudio. "Estamos en diálogo con la Consejería de Salud para ampliar el límite de edad, que actualmente es de 40 años, a los 42 años", explica. Esta medida podría ofrecer nuevas oportunidades a mujeres que desean ser madres, contribuyendo así a paliar, aunque sea parcialmente, el declive demográfico.

Según explica la jefa de la Unidad de Ginecología y Obstetricia del Hospital San Pedro, "a partir de los 40 años, la probabilidad de quedarse embarazada disminuye considerablemente, situándose entre un 5% y un 10%, frente al 30% que se registra a los 25 años". Además, a partir de esa edad también aumenta significativamente la tasa de abortos. Actualmente, se están manteniendo continuos diálogos con otras comunidades autónomas para analizar los resultados obtenidos en regiones donde ya se ha ampliado la edad máxima para acceder a los tratamientos de fertilidad. Será la Consejería de Salud de La Rioja la encargada de valorar y, en su caso, poner en marcha esta medida, cuyo objetivo es ofrecer más opciones a mujeres que desean ser madres, en un contexto marcado por la baja natalidad en la región.

Todas las medidas son bienvenidas

Por su parte, el sociólogo Sergio Andrés Cabello asegura que cualquier medida para mejorar la natalidad siempre es bienvenida, pero señala que estamos ante "un escenario muy complejo" en el que el retraso al tener el primer hijo en La Rioja con más de 32 años, significa que la ciudadanía prioriza otros aspectos antes de quedarse embarazada. "El hecho de no tener una estabilidad laboral o profesional, unas bases fijadas en definitiva, es lo que encontramos cuando analizamos estos procesos como el factor determinante a la hora de tomar una decisión de la gente que quiere tener hijos".

Y, por ello, por ese retraso, quizá esta medida, según el sociólogo, pueda ser oportuna aunque el escenario es complicado. "Vamos a ver si esto permite ayudar a esas personas que, al llegar a esa edad, debido al retraso en la toma de decisiones vinculado a diversos factores, puedan ampliar el plazo para tener hijos", concluye.

Invierno demográfico

La Rioja está inmersa en un preocupante invierno demográfico que dura décadas y parece consolidarse como una tendencia difícil de revertir. Los datos: durante los tres primeros meses del año pasado nacieron 455 niños, la cifra más baja de los últimos tiempos. Ahora, con el balance completo de 2023, la situación se confirma. Según el Instituto Nacional de Estadística, el pasado año nacieron 1.999 bebés, el número más bajo desde que existen registros.

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