Diego Molia, presidente del Grafometal Sporting La Rioja: "Estamos buscando la fórmula para que Luismi Ascorbe pueda continuar"

Logroño

"Sentí alivio por las sensaciones encontradas durante la temporada". El Grafometal Sporting La Rioja celebra su permanencia en la Liga Guerreras Iberdrola a la par que su presidente, Diego Molia, ya prepara el capítulo III del conjunto logroñés en la máxima categoría. Las nuestras cerrarán la temporada este sábado a las 19:00 horas en el Palacio contra La Calzada y lo harán después de una campaña que bien podría asemejarse a una montaña rusa. Altibajos por doquier para un Grafometal Sporting La Rioja que poco a poco quiere consolidar su presencia en una división cada vez más exigente.

El inicio del equipo riojano, marcado por una dinámica realmente positiva para tratarse de un recién ascendido, permitió a las nuestras soñar incluso con las posiciones que permitían luchar por el título. El anhelo pronto se transformó en un mazazo de realidad que cambió por completo las aspiraciones del Grafometal Sporting La Rioja. Nueve derrotas consecutivas provocaron un relevo en el banquillo y Luismi Ascorbe volvió a enchufar a un equipo que Juanjo González abandonó después de tres temporadas y media.

A pesar de no haber cumplido todavía el objetivo, el Grafometal Sporting La Rioja cuenta con hasta ocho jugadoras con contrato de cara a la próxima temporada: Paula Morales, Blanca Benítez, Mina Novovic, Lorena Pérez, Andrea Loscos, Maitane Larrayoz, Karia Sidibe y Geandra Rodrigues. Además, el club también ha confirmado la salida de Marina González, que ha fichado por el Elda Prestigio, y la retirada de Taty Lozano, que dice adiós al balonmano con 28 años por dolencias físicas en sus rodillas.

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