El fiscal asegura que la mujer asesinada en Logroño en 2020 tenía miedo de su marido
Primera jornada de este juicio que se prolongará hasta el 31 de octubre

El fiscal asegura que la mujer asesinada en Logroño en 2020 tenía miedo de su marido (2025-10-20)
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Logroño
El fiscal, que pide 22 años de cárcel a un hombre como presunto autor del asesinato de su mujer en Logroño en 2020, ha dicho este lunes en el juicio que “la mató porque ese matrimonio estaba roto, ella no era feliz y había manifestado su intención de divorciarse, aunque tenía miedo de la reacción de su marido”.
La Audiencia Provincial de La Rioja ha acogido la primera jornada del juicio con tribunal popular contra un hombre de 61 años, que se prolongará hasta el próximo 31 de octubre.
La acusación particular, ejercida por los ocho hermanos de la víctima, pide la misma pena que el fiscal, también con la agravante de parentesco y por razón de género; mientras que la defensa del acusado ha negado su autoría, pero en el “improbable caso” de que haya cometido estos hechos, concurriría la circunstancia atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas.

LOGROÑO, 20/10/2025.- Vista general durante la primera sesión del juicio con tribunal del jurado contra un hombre, presunto autor del asesinato con alevosía de su mujer en Logroño en 2020, por lo que el fiscal le pide 22 años de cárcel, este lunes en la Audiencia Provincial de La Rioja. EFE/ Raquel Manzanares / RAQUEL MANZANARES

LOGROÑO, 20/10/2025.- Vista general durante la primera sesión del juicio con tribunal del jurado contra un hombre, presunto autor del asesinato con alevosía de su mujer en Logroño en 2020, por lo que el fiscal le pide 22 años de cárcel, este lunes en la Audiencia Provincial de La Rioja. EFE/ Raquel Manzanares / RAQUEL MANZANARES
Las acusaciones han relatado, durante las conclusiones provisionales, que el procesado se encontraba con el hijo del matrimonio en Gumiel del Mercado (Burgos), pero regresó al domicilio conyugal la madrugada del 13 de octubre de 2020, entró con sus llaves y asestó varias puñadas a su mujer para causarle su muerte.
Después, regresó por la mañana al pueblo burgalés, donde permaneció hasta la tarde y, de vuelta a Logroño, descubrió el cadáver de su mujer y llamó al servicio 112 y a sus cuñados para contar que “se había suicidado”.
El fiscal ha recalcado que “nadie se suicida con seis puñaladas profundas en el cuerpo”, como, ha dicho, acreditarán durante el juicio los forenses que realizaron la autopsia de la víctima.
Cuando llegó la Policía a la casa vio “una escena complicada, con cajones movidos y un bolso tirado en una habitación, porque alguien ha manipulado la escena”, ha señalado.
También ha explicado que una semana después del crimen, el acusado dijo a la Policía que, “pensando”, se había acordado de que un amigo tenía llaves de la casa, que no había sido forzada.
Ha agregado que la víctima tenía restos del adn de su marido en las palmas y el dorso de las manos y en las uñas y también aparecieron pelos suyos en el lugar de la muerte.
Ganas de continuar con su vida
Por otro lado, el abogado de la acusación particular ha subrayado que la mujer quería divorciarse y era infeliz con su marido, quien recriminó a sus cuñados que “menuda le había preparado” su esposa al suicidarse.
“Tenía ganas de volver a trabajar, separarse y continuar con su vida”, ha subrayado este letrado.
Sobre el acusado, ha dicho que le dio información “con cuentagotas” a la Policía porque primero dijo que era un suicidio, luego el robo y después que otro hombre tenía llaves de su casa.
Intuiciones y sospechas
La abogada de la defensa ha cuestionado toda la investigación policial, basada en “intuiciones y sospechas”, sin ninguna prueba que sostengan "las absurdas teorías de las acusaciones”.
Ha recalcado que le recuerda el caso de Dolores Vázquez -condenada por el asesinato de Rocío Wanninkhof y después excarcelada cuando se demostró su inoncencia-, porque aquí también ha habido “muchas prisas por zanjar la investigación y hacer detenciones”.
Por ello, ha pedido a los miembros del jurado que sean “responsables”, cuestionen cada testimonio y confirmen si los argumentos de las acusaciones tienen base probatoria.
Ha insistido en que es “imposible” que su defendido matara a su esposa porque no hay cámaras sin grabaciones que lo sitúen en Logroño, “a no ser que fuera Spiderman y trepara por la ventana del edificio, pero debería haber sido también el hombre invisible”.
Para esta letrada, la investigación policial ha sido “un despropósito, ni Mortadelo y Filemón hacen un atestado como este, da bochorno”.
Según sus datos, los restos de adn pueden quedar en el cuerpo de otra personas durante varios días y, además, quedaron muchos pelos de la escena del crimen sin analizar, porque “la Policía ya tenía su asesino y no se investigaron más perfiles genéticos”.
A su juicio, “la investigación policial ha sido tendenciosa y falsa”, las forenses dan un margen de 20 horas sobre la data de la muerte y se oyó un grito desgarrador de la víctima el día 13 a la una del mediodía, por lo que ha insistido en que “la policía se ha inventado un culpable”.
Recibe toda la información de Radio Rioja en nuestro canal de WhatsApp.




