Cáritas La Rioja atendió en 2024 a 148 personas sin hogar, un fenómeno social que continúa arraigado en la región

Logroño

El domingo 26 de octubre se celebró el Día de las Personas Sin Hogar, pero Cáritas La Rioja conmemora la cita este jueves con un acto a las 18 horas de la tarde en la Plaza del Mercado.

Los datos en nuestra región indican que la entidad acompañó a 148 personas con exclusión residencial grave para mejorar su calidad de vida e inclusión social.

Perfil de las personas sin hogar

Mayoritariamente, son hombres, en un 92 por ciento y marcado por la migración, el 79 por ciento son extranjeros. Además, detallan que uno de cada tres se encuentra en situación irregular. En su mayoría, un 63 por ciento, tienen entre 36 y 65 años. Cáritas reclama políticas públicas de vivienda para atender a estas personas en exclusión. Marcos Montoya, técnico del programa de personas sin hogar, explica que "el alquiler social podría ir destinado a distintos colectivos, entre uno de ellos podría ser las personas en situación de sin hogar, familias en vulnerabilidad, personas en soledad, mujeres víctimas de violencia de género. Creemos que hace falta aumentar ese parque público de vivienda para que el derecho a la vivienda digna esté también satisfecho para estos colectivos".

Las personas sin hogar padecen problemas de salud física y mental ante las crecientes dificultades para encontrar un trabajo decente que les permita acceder a una vivienda digno. "Tenemos claro que el empleo hoy en día no te garantiza el tener todas tus necesidades cubiertas y en especial el de la vivienda. En el acceso a la vivienda desde la pandemia del COVID-19, tanto en temas de requisitos como en el propio precio de la vivienda, nos estamos encontrando que muchos perfiles que antes sí que podían, entre comillas, encontrar una vivienda, no digamos de manera fácil, pero de una manera asequible, ahora mismo es imposible con la situación de vivienda que hay".

"Un laberinto con difícil salida"

Cáritas define la situación de las personas sin hogar como un laberinto con difícil salida, que, en muchas ocasiones, les obliga a vivir en infraviviendas, además de bajeras o trasteros. "No son datos exactos, pero creemos, al menos nosotros hemos atendido unas 400 o 500 familias en esta situación, en temas de alquileres o que viven en viviendas compartidas.

Desde Cáritas apelan a la sociedad a trabajar en una solución para estas personas "sin hogar, pero con sueños", como reza el lema de la campaña de Cáritas.

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