El precio de los carburantes se mantiene alto pese al bajo precio del barril de petróleo
El aumento de la demanda en invierno podría incrementar el precio
El precio de los carburantes se mantiene alto pese al bajo precio del barril de petróleo
Los precios de los carburantes se mantienen estables en La Rioja pese al bajo coste del petróleo. La presidenta de las estaciones de servicio de La Rioja, Ana Benés, asegura que los precios de los carburantes se han mantenido “sorprendentemente estables” en los últimos meses, a pesar de que el petróleo se encuentra en valores muy bajos. Según explica, estos precios reducidos del crudo no se reflejan directamente en los surtidores debido al peso de los costes fijos, impuestos y otros factores que influyen en el precio final que pagan los consumidores.
Benés confirma que, aunque a finales de noviembre se produjo un repunte puntual del 3% al 4%, los precios han vuelto a descender al finalizar el mes. También reconoce que las bajadas tardan más en trasladarse a los surtidores que las subidas, en parte por cuestiones de stock: “La mayoría de las estaciones no trabajan al día, y si el petróleo baja, el precio puede mantenerse de forma temporal”.
De cara a las próximas semanas, la presidenta señala que hacer previsiones es complicado debido a la inestabilidad internacional y a las tensiones geopolíticas que afectan al precio del petróleo. Aun así, recuerda que el invierno suele traer incrementos en el coste del carburante por el aumento general de la demanda, desde calefacciones hasta transporte profesional.
Sobre el encarecimiento del diésel, que podría superar pronto el precio de la gasolina, Benés no se atreve a dar una fecha concreta, pero reconoce que la diferencia entre ambos combustibles “cada vez es más corta”. Añade que las políticas que buscan reducir el número de vehículos diésel y fomentar el uso de eléctricos e híbridos están empujando al alza el precio del gasóleo.
Gasolina barata y de calidad
La OCU analizó 80 muestras de combustible (40 de gasolina de 95 octanos y 40 de gasóleo) procedentes de 26 cadenas distintas de estaciones de servicio en España, incluyendo grandes cadenas, medianas y low-cost. Todas las muestras fueron tomadas directamente de la manguera de la estación y analizadas en laboratorio según los parámetros marcados en las normas europeas para carburantes: presencia de azufre, densidad, apariencia, evaporado, punto de ebullición, agua, punto de obstrucción del filtro, entre otros.
Los resultados muestran que todas las muestras cumplen la normativa exigida, sin encontrar diferencias sistemáticas entre carburantes de bajo coste y los de cadenas tradicionales. En concreto, no se halló relación entre el precio pagado por el combustible y su calidad técnica medida: unas estaciones “más baratas” ofrecían la misma calidad que las más caras. Además, el informe indica que el precio del combustible sí varía bastante entre cadenas: repostar en estaciones de hipermercado o low-cost puede suponer un ahorro de entre 9 y 10,5 euros por un repostaje de 70 litros respecto a las cadenas principales.
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