La pobreza energética afecta con especial intensidad a quienes viven de alquiler

Logroño

La pobreza energética golpea con fuerza a los hogares de alquiler en invierno. Un estudio revela que el 30 por ciento de los inquilinos no puede mantener una temperatura adecuada en sus casas durante los meses de frío. El frío pone en evidencia la vulnerabilidad energética de quienes viven de alquiler. Este informe señala que todos los indicadores de pobreza energética son significativamente más altos entre los inquilinos.

Desde la asociación El Llavero, advierten de que el encarecimiento del alquiler y de la energía empuja a muchas personas a tener que elegir. "Y estas personas lo que hacen es elegir si pagar la habitación, si pagar algo de comida o si pagar la parte energética", dice Elena Sáenz de Urturi, de la Asociación El Llavero.

Una situación que obliga a muchas familias y personas a recurrir a los servicios sociales. Sin embargo, Urturi subraya que los recursos del tercer sector son limitados.

"Estar ligados estas personas a servicios sociales o entidades privadas que les permitan de alguna forma cubrir eso que ellos no pueden cubrir, que tampoco puede ser continuado en el tiempo, porque evidentemente ni servicios sociales ni las entidades privadas tienen dinero suficiente como para cubrir esta necesidad básica de calentarse en el invierno a todas las personas que lo necesitarían".

E insiste en que abordar esta realidad requiere una intervención de mayor alcance. Es un problema estructural muy grande que en esta sociedad vivimos, igual que el hecho de la vivienda en sí misma, el hecho de que las personas hay una pobreza energética, es una situación precaria, es una situación de violencia estructural por parte de la sociedad a las personas que están en esta situación".

Y es que los precios del alquiler y el coste de la energía son factores que condicionan la vida de miles de personas en La Rioja.

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