¿Qué controlará Hacienda en Bizum a partir de enero y a quién afecta realmente?

Logroño

La entrada en vigor, a partir de enero, de una nueva normativa sobre Bizum y el control fiscal ha generado inquietud entre usuarios, autónomos y empresas. Sin embargo, el cambio no supone nuevas obligaciones para los particulares. Así lo explica Begoña Villaluenga, del despacho Villaluenga Iturza Asesores y Abogados, en una entrevista en Radio Rioja, donde lanza un mensaje de tranquilidad y aclara en qué consiste realmente la medida.

Villaluenga señala que la normativa amplía la información que las entidades financieras ya remiten a la Agencia Tributaria. Hasta ahora, los bancos informaban de las operaciones con tarjetas de crédito y débito, y a partir de enero esa información se extiende también a los pagos realizados mediante Bizum, un sistema cada vez más habitual. “No es una normativa nueva en sí misma, sino una ampliación de la información que ya se estaba aportando”, explica.

La asesora insiste en que los particulares no tienen que hacer nada distinto. “Un Bizum para pagar una cena, un regalo o repartir gastos no va a tener ninguna consecuencia fiscal”, subraya. El foco de la normativa está puesto en autónomos, profesionales y empresas, especialmente en aquellos casos en los que no se diferencian las cuentas personales de las vinculadas a la actividad económica.

Según Villaluenga, el problema puede surgir cuando un autónomo cobra a clientes a través de Bizum en una cuenta personal. En esos casos, Hacienda puede analizar la habitualidad, el número de operaciones y los importes, lo que puede derivar en una comprobación. Por eso, recuerda que separar las cuentas no es solo una recomendación actual, sino “un consejo que se viene dando desde hace muchos años” para facilitar cualquier revisión por parte de la administración.

Las entidades financieras informan a Hacienda a través de distintos modelos sobre los titulares reales de las cuentas, el número de cobros y pagos y la frecuencia de las operaciones. Villaluenga apunta que esta medida se enmarca en la lucha contra el fraude y que, en la práctica, Bizum ya se venía revisando en inspecciones anteriores. “Ahora lo que se ha hecho es darle forma normativa a algo que ya existía”, indica.

La asesora reconoce que este tipo de cambios generan preocupación, especialmente entre autónomos y profesionales de mayor edad, que acumulan en los últimos años subidas de cotizaciones y nuevas obligaciones. Ante ese contexto, lanza varias recomendaciones claras: separar cuentas, usar correctamente los medios de pago y, también para los particulares, añadir siempre un concepto en los Bizum. “No cuesta nada poner ‘regalo’, ‘cena’ o ‘gastos’, y eso ayuda a identificar la operación”, explica.

En definitiva, Villaluenga insiste en que no hay motivos para la alarma social y que el uso cotidiano de Bizum entre particulares sigue siendo completamente seguro, siempre que se utilice con sentido común y claridad.

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